Una gran carpa virtual en Colón propone a los niños "jugar con la Navidad"

La Navidad de los niños está en la plaza de Colón y es virtual. El alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, inauguró ayer la gran carpa de ocio dedicada a los más pequeños, que estará abierta hasta el próximo 6 de enero y con la que el Ayuntamiento invita a los niños a "jugar con la Navidad". Aunque los juegos que les propone no son precisamente tradicionales, sino informáticos: videojuegos, videoconferencias, cuentacuentos por ordenador... "Es la magia de las nuevas tecnologías", explica Juan del Álamo, delegado de Participación Ciudadana.

El gobierno municipal, señala Del Álamo, confía en que la carpa virtual de Colón se convierta en el "nuevo buque insignia del ocio navideño en Madrid", junto a la feria Juvenalia o la cabalgata de Reyes. Para lograrlo se ha gastado 270.000 euros -el resto, hasta 500.000, lo ponen las empresas patrocinadoras- en montar una carpa de 25 por 30 metros en medio de la plaza de Colón y seis "iglús hinchables" a su alrededor con diversas actividades gratuitas para los niños. Estará abierto todos los días hasta el próximo 6 de enero, de 11.00 a 14.00 y de 16.30 a 21.30; en Nochebuena y Nochevieja cerrará a las 19.00, y el 25 de diciembre y 1 de enero sólo funcionará en el horario de tarde.

Las actividades son casi exclusivamente de carácter virtual, incluso las que aparentemente sonarían más tradicionales: habrá, por ejemplo, un cuentacuentos, pero hablará con los chavales a través de una pantalla. También muchos videojuegos y clases de ordenador para niños menores de cinco años. "Lo que hemos buscado es un poco la magia de las nuevas tecnologías, que es la de la Navidad. Habrá algún mimo, y coros de villancicos, pero fundamentalmente hemos querido potenciar el uso del ordenador entre los más jóvenes", dice el delegado de Participación Ciudadana.

En el centro del recinto de ocio se levantará la carpa, con más de 700 metros cuadrados dedicados a la realidad virtual. En ella se proponen juegos diferentes (a los que podrían añadirse otros, a petición de los visitantes): la carrera de gritos -donde el motor que hace avanzar a los jugadores es su grito frente a un micrófo-no-, la carrera de camellos -el movimiento de las manos de los participantes, que será captado por una cámara, hará avanzar a los camellos-, el "snow virtual" -el niño descenderá por la ladera de una montaña nevada merced a unas gafas de realidad virtual-, el "cameraction en tiempo real" -el jugador procurará que no se le caigan de las manos objetos que aparecerán sobre una pantalla en la que se proyectará su silueta- o el árbol virtual -una travesía por el desierto, con destino el portal de Belén, salvando obstáculos y siguiendo las indicaciones que el árbol dictará a través de unos cascos-.

A un costado de esta carpa principal se ha organizado una especie de parque infantil compuesto por seis "iglús hinchables" que ofrecen distintas actividades, incluidas clases de informática para los más pequeños. De nuevo, realidad virtual ligada a "la tradición navideña del cuento y a la magia de Papá Noel o los Reyes Magos", según el comunicado del Ayuntamiento.

Los niños escucharán relatos y protagonizarán su propio cuento virtual, que será contemplado por otros niños asistentes; diseñarán tarjetas de felicitación con el ordenador y las enviarán a sus amigos por Internet, y podrán comunicarse mediante videoconferencia con los magos de Oriente o con Papá Noel para encargarles sus regalos. "Procuraremos que sean regalos no materiales sino conceptuales, como paz", matiza Del Álamo. "Y, cuando el niño lo pida, una bola o algo se iluminará en el árbol de Navidad que hay en la plaza".

Para completar la imagen navideña, el monumento que conmemora el descubrimiento de América será decorado e iluminado con motivos al gusto de estas fechas. Además, un autobús turístico municipal permanecerá estacionado en la plaza para informar a cuantos se acerquen a él de las propuestas navideñas de la ciudad para niños y mayores.