Islamistas detenidos en Francia y Bélgica vinculan a Hassan el Haski con el 11-M

El islamista radical Hassan el Haski, detenido el pasado viernes en Lanzarote y uno de los principales cabecillas del Grupo Islámico Combatiente Marroquí (GICM) en Europa -organización responsable de los atentados de Casablanca de mayo de 2003-, podría estar vinculado directamente con los atentados del 11 de marzo en Madrid, según declaraciones de otros miembros de ese grupo terrorista arrestados en Francia y Bélgica. El Haski, de 41 años y que habría recibido entrenamiento en Afganistán, según fuentes policiales, residía legalmente en España.

Fuentes de Interior aseguran que algunos islamistas detenidos y encarcelados en Francia y Bélgica han declarado que antes de producirse los atentados del 11-M El Haski ya hablaba sobre su preparación, y que semanas antes de que estallaran las bombas en los trenes de Madrid su actitud cambió, y, además de tomar distintas medidas de seguridad, pasó a mostrarse más tenso en las reuniones.

De hecho, el nombre de Hassan el Haski habría aparecido en la reunión celebrada entre policías españoles y franceses durante este año con el fin de colaborar en la detención de radicales islamistas presentes en los dos países. Investigaciones policiales sitúan casi con toda seguridad a El Haski durante una temporada en Afganistán, probablemente para recibir entrenamiento.

El Haski se encontraba residiendo de modo legal en España antes de su detención, y tenía que renovar su permiso de residencia a principios de 2005. Otro de los radicales islamistas detenidos el viernes ya posee la nacionalidad española.

Relación con Casablanca

El GICM ha sido vinculado a los atentados de Casablanca de mayo de 2003, donde hubo 41 muertos -entre ellos dos españoles que cenaban en la Casa de España de esa ciudad- y al asesinato del director de cine holandés Theo Van Gogh el pasado 2 de noviembre en Amsterdam. Fuentes de Interior señalan que, aunque El Haski, como uno de los líderes del GICM en Europa podría tener conocimiento de estos atentados, es prematuro todavía señalarle como responsable directo de estos actos terroristas.

El análisis de los numerosos documentos en árabe, cartas, disquetes de ordenador y números de teléfonos móviles encontrados en los registros de los domicilios de los detenidos el viernes en Lanzarote podrá confirmar o no las relaciones directa de El Haski con estos atentados.

La policía sospecha que El Haski había elegido Lanzarote para instalar su base logística porque lo consideraba un lugar más seguro después del acoso al que había sido sometido el GCIM en Francia y Bélgica, con las detenciones de varios de sus miembros.

En realidad, la pista que ha permitido localizar y detener la célula de Lanzarote liderada por Hassan el Haski proviene de la recepción en España de una comisión rogatoria enviada por las autoridades belgas. Éstas, a su vez, habrían recibido otra comisión rogatoria de Francia como consecuencia de la detención por parte de los gendarmes de un ciudadano sirio integrado dentro del GCIM. Según fuentes de la investigación, este islamista radical habría declarado que El Haski era uno de los líderes principales en Europa del GCIM.

Las autoridades francesas sospecharon en un primer momento que Hassan El Haski estaba viviendo en Bélgica, de ahí la comisión rogatoria que enviaron a ese país. Al comprobar la policía belga que El Haski podría en realidad estar residiendo en España, instó una nueva comisión rogatoria a España.

Tras su llegada el sábado a Madrid en una avión militar, El Haski se encuentra detenido en la Comisaría General de Información, a la espera de prestar declaración, probablemente el martes, en la Audiencia Nacional ante los jueces Baltasar Garzón y Juan del Olmo. Ambos jueces dirigieron conjuntamente la operación contra los islamistas radicales del viernes en Lanzarote.

Junto a El Haski prestarán declaración en la Audiencia Nacional los otros tres detenidos: Abdallah Mourib, de 36 años e imán de la mezquita de Puerto del Carmen; Ali Fahimi, de 31 años, y Brahim El Hammouchi, de 40 años.