Rabanera mantendrá y someterá a votación los Presupuestos aunque no logre el apoyo socialista
El diputado general alavés, Ramón Rabanera, anunció ayer que, a diferencia del año pasado, esta vez mantendrá y someterá a votación el proyecto de los Presupuestos forales para 2005, aunque no logre el apoyo socialista y tenga, por tanto, asegurada la derrota en las Juntas Generales.
Rabanera adelantó ya que elegirá antes la prórroga que "unos malos presupuestos" y sugirió que las importantes modificaciones propuestas por el PSE-EE darían lugar a unas cuentas deficientes. El diputado general aceptó como obligación propia la aprobación del presupuesto anual de la institución, pero matizó que también es su responsabilidad "que la Diputación sea viable financieramente en el futuro".
El diputado general alavés dijo que intentará por todos los medios y hasta el final un acuerdo con el PSE-EE, pero no mostró mucha confianza en lograrlo. El Grupo Socialista ha pedido cambios en 24 partidas por valor de 41,5 millones. A juicio de Rabanera, el PSE "ha hecho unas propuestas "imposibles" para que el Gobierno foral tenga que dar respuesta negativa, y habría actuado de ese modo "por no decir que no van a apoyar los Presupuestos". El PNV, afirmó, "ha sido más claro y sincero al anunciar desde el principio una enmienda a la totalidad".
Rabanera se encuentra en minoría desde las elecciones de 2003, cuando el PSE le dio su apoyo para evitar un diputado general nacionalista, pero le advirtió de que se vería en apuros al no aceptar el PP ceder ni la cabeza de la Diputación ni la alcaldía de Vitoria. La cercanía de las elecciones autonómicas obstaculiza más aún el apoyo del PSE, orientado a una campaña de disputa del voto nacionalista moderado, ante el que un acuerdo con el PP en Álava sería contraproducente con esa estrategia.
Fuentes cercanas al diputado general quitaban ayer dramatismo a un probable desenlace de prórroga y aludieron al mandato 1999-2003, cuando las diputaciones de Vizcaya y Guipúzcoa vivieron esas mismas dificultades.
