_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Apagón

Manuel Rivas

Hay que confiar siempre en la buena fe de las personas, así que creo que Ángel Acebes, ex ministro del Interior en la última época de Aznar y actual secretario general del Partido Popular, ya tenía el trueno gordo en la punta de la lengua y ha encontrado en Moratinos el ansiado chivo explicatorio para el apagón. Como apuntó otro piadoso con el cátodo a cien, y sin que conste en acta, Moratinos "se cagó su propia fosa". Y están en lo cierto. Hasta parte de los suyos lo repelen. No se puede andar por ahí respondiendo a los golpes con verdades como témpanos. Las cosas no se hacen así. Para contar lo ocurrido en Venezuela en abril de 2002 debería haber esperado un poco. Cuarenta años, por ejemplo. Como Manuel Pimentel, el ex ministro que escapó de Aznar, cuando recuerda lo que le respondió todo un alcalde: "Manolo, yo quiero invernaderos, pero no quiero inmigrantes". (¿Notan la electricidad resinosa en el espinazo de las palabras?). Y el hombre que no se somete al silencio mudo desvela también: "Entramos (en Irak) porque Aznar quiso. No existe otro motivo de fondo. Lo decidió él por su cuenta. La ministra de Exteriores lo supo por los periódicos y el PP apoyó por unanimidad hacer esa guerra sin antes ser consultado para nada" (A Nosa Terra, 25-11-04). Las memorias frescas provocan una inquietud eléctrica. Recuerdo a mi madre, valiente como la O'Hara, cortar el pescuezo a un pato para comer. El ánade se le fue de las manos y nos sobrevoló sin cabeza. Mi madre me aleccionó: "Tenía mucha electricidad dentro". Todo lo que está pasando tiene una explicación eléctrica. La oposición neocatódica se encuentra sumida en lo que la Historia de la Electricidad denomina Periodo del Electrogalvanismo, es decir, entre 1786 y 1800, en el que un episodio no menor fue la publicación por Galvani de su Teoría de la electricidad animal. Se trata de la galvanización. Y todo esto cuando el sistema eléctrico está algo caduco. Otro recuerdo: había un señor con el mote Caduco. "¡No le llaméis Caduco, que os fulmina!". Era un alias causal. Yo vi cómo apagaba una vela con la mirada. El señor Aznar comparece el lunes en la comisión del 11-M. No se descarta un apagón.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_