EE UU prohíbe 'La mala educación' de Almodóvar a menores de 17 años

La película de Pedro Almodóvar La mala educación, que se estrenó el pasado viernes en las salas de cine de Nueva York, ha sido clasificada NC-17 por la Asociación del Cine Americano (MPAA), por lo que ningún menor de 17 años podrá verla, ni siquiera acompañado por un adulto. Pese a ello, el promedio de recaudación hasta ahora, y antes del estreno en el resto del país, es el más alto de los filmes del realizador, según informó la productora.

"Una escena de contenido sexual" es el motivo que la MPAA cita para justificar la calificación, según informó Variety. En efecto, es el encuentro que mantienen en la película Gael García Bernal y Alberto Ferreiro lo que desagradó al comité calificador y no la historia de abusos sexuales a menores en un colegio de curas, ya que en este tramo del filme no hay escenas explícitas. La distribuidora del largometraje, Sony Pictures Classics, aspiraba a que la designaran R (restricted), que permite que los menores de 17 años entren a la sala si van acompañados.

Quejas e intereses

Esta decisión, además, ha sido muy mal recibida entre los profesionales del cine independientede EE UU, cada vez con mayor peso. Se quejan de que en el comité que otorga las clasificaciones hay representantes de los grandes estudios, pero nadie tiene ocasión de velar por los intereses de las pequeñas compañías.

Precisamente fue con otra película de Pedro Almodóvar, Átame, cuando se creó este nuevo apartado en el sistema de calificación. Fue en 1990 cuando la MPAA decidió que las escenas de contenido sexual de aquel largometraje le hacían acreedor de una X. A las quejas del director español y de su distribuidora en Estados Unidos se unió la de Peter Greenaway, que veía cómo su El cocinero, el ladrón, su mujer y su amante corría idéntica suerte. Además, Martin Scorsese y David Lynch se vieron obligados a retocar Uno de los nuestros y Corazón salvaje, respectivamente, para evitar la temida X. Las acusaciones de censura contra la MPAA fueron tan clamorosas que la asociación se vio obligada a modificar su sistema y crear la denominación de NC-17.