Los Reyes almuerzan en privado con los Bush en el rancho de Tejas

Los reyes de España almorzaron ayer con el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, su esposa, Laura, y los padres del mandatario, George y Barbara Bush, en su rancho de Crawford (Tejas). George W. Bush, que conmemoró de formada anticipada don Juan Carlos y doña Sofía el Día de Acción de Gracias, una fiesta netamente familiar en EE UU, declaró a los periodistas que "España es un gran país y un buen amigo".

Tras saludar a los Reyes a su llegada al rancho de Crawford, el presidente Bush fue interrogado por los periodistas sobre el significado de la reunión, a lo que respondió: "España es un gran país y un buen amigo". Eso fue todo. No hubo más declaraciones. Luego, montó en el coche y se despidió con un "adiós" en español. A su lado se sentó don Juan Carlos. En los asientos posteriores viajaron Laura Bush y doña Sofía.

Un portavoz de la Casa del Rey resaltó que, "en la diplomacia los gestos tienen tanto que ver y son tanto o más importantes que los contenidos". Y un gesto fue que los Bush adelantaran a ayer el almuerzo familiar del Día de Acción de Gracias, fiesta que se celebra hoy. Del contenido de la conversación que mantuvieron con los Reyes nada se supo. Sólo trascendió que el ambiente fue "distendido", como corresponde a la "estupenda relación que existe entre la familia real y los Bush", según fuentes de la Casa del Rey. Éstas añadieron que España y EE UU han tenido siempre una magnífica relación "independientemente de los Gobiernos que haya habido". El mismo portavoz señaló que la Casa del Rey se suma a la declaración difundida por la Casa Blanca la semana pasada acerca de que el almuerzo de ayer -una invitación personal de Bush a los Reyes de España- forma parte de la iniciativa para "dar un impulso" a las relaciones de España y Estados Unidos.

Don Juan Carlos habló por teléfono con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, desde EE UU pocas horas antes del almuerzo con Bush.

Las relaciones entre la Administración de Bush y el Gobierno español pasan por un momento delicado desde que el presidente Zapatero ordenó, al día siguiente de asumir el cargo, retirar las tropas enviadas a Irak. La tensión en las relaciones ha quedado patente en varios episodios a lo largo de los últimos meses, en especial tras la ausencia del embajador de EE UU en Madrid en los actos de la Fiesta Nacional, el pasado 12 de octubre.

George W. Bush contestó la semana pasada al presidente del Gobierno, mediante una carta, a la felicitación por la reelección que Rodríguez Zapatero le había dirigido en una llamada a la Casa Blanca pocas horas después de la jornada electoral del pasado 2 de noviembre. El jefe del Ejecutivo español expresó durante la reciente Cumbre Iberoamericana en San José de Costa Rica su optimismo sobre los resultados del encuentro en Crawford.

Bajo un cielo encapotado, en un día de frío y viento, el helicóptero que trasladó al Monarca y su esposa desde Waco a Crawford aterrizó en el rancho de los Bush cerca de las 11.30, hora local (siete horas más en la España peninsular). Los Bush y los Reyes compartieron luego un almuerzo típico del Día de Acción de Gracias.