Dos hinchas del Blackburn, arrestados por insultos racistas

Dos hinchas del Blackburn Rovers fueron arrestados ayer y acusados formalmente de haber insultado de manera racista a Dwight Yorke, delantero del Birmingham City, en la visita de este equipo a Edwood Park el domingo pasado. El incidente se ha producido a los pocos días de que los jugadores de Inglaterra fueran sometidos a burlas racistas por una buena parte del publico que acudió al amistoso España-Inglaterra del pasado miércoles en Madrid. La unánime reacción de la prensa británica tras los sucesos del Bernabéu ha sensibilizado a todo el Reino Unido ante un problema que en este país se considera casi extirpado mientras se denuncia como de gran envergadura en España, Italia y Europa del Este.

Por eso se ha dado gran importancia al incidente del domingo en Edwood Park. Yorke, que hasta la temporada pasada jugaba en el Blackburn, fue mal recibido por la hinchada local cuando empezó a calentar en una banda, pasada la media hora de la segunda parte de un partido apasionante que acabó con 3-3. Según Yorke, dos jóvenes espectadores fueron más allá de la protesta futbolera e incurrieron en insultos racistas, incluida la imitación simiesca que se vivió en el Bernabéu. El jugador, que cruzó una valla publicitaria para exigir explicaciones a los dos jóvenes, presentó denuncia al término del partido.

Los dos jóvenes fueron filmados por la televisión y su fotografía publicada por la prensa. El lunes, la policía de Blackburn viajó a Birmingham para escuchar las denuncias del jugador e hizo luego un llamamiento público para que se entregaran los dos espectadores. Ambos jóvenes se presentaron ayer en comisaría, a las cuatro de la tarde, y fueron formalmente acusados de racismo 4 horas después.

Tanto el entrenador como la directora general y el presidente del Birmingham han apoyado plenamente a su jugador y han elogiado la excelente colaboración brindada en todo momento por el Blackburn. Sin embargo, el presidente de la sociedad propietaria del Birmingham, David Sullivan, sorprendió con unas declaraciones quitando importancia al incidente e invitando al jugador a dejar el club si ese era su deseo. "Todo esto es desproporcionado. Yo no he oído nada. Son sólo tres de 22.000 espectadores", declaró Sullivan el lunes.

Pero los ejecutivos del Birmingham reiteraron ayer su absoluto apoyo al jugador. "Estamos con Dwight, no hay sitio para estas cosas después de ver los sucesos horribles de la semana pasada en España y es evidente que, aunque sólo se trate de una persona entre 22.000, se trata de una persona de más", dijo su técnico, Steve Bruce.