Tablada acogerá rutas hípicas, deportivas, un humedal y un centro de recepción con embarcadero
El plan del parque descarta un campo de golf y estudia mantener la pista de aterrizaje
El futuro parque de Tablada acogerá, entre otras cosas, instalaciones deportivas, rutas hípicas y un humedal que permita recuperar especies de aves que habitaban en la zona. El nuevo parque de Sevilla tendrá varios accesos, pero el centro de recepción, al que se podrá llegar en metro, se situará en San Juan de Aznalfarache; desde allí se podrá ir en barco por el Guadalquivir al centro de la dehesa. Aunque el proyecto no está cerrado, los primeros estudios sobre los usos del parque concentran los equipamientos en la zona más próxima a la capital. La más alejada quedará como paraje natural.
La Consejería de Medio Ambiente encargó hace unas semanas a la Universidad de Sevilla un estudio sobre los usos que podría tener la dehesa de Tablada como parque periurbano una vez que se consume la expropiación anunciada por el Ayuntamiento. Los primeros diseños prevén una gradación de usos de forma que la parte norte, la más próxima a la capital, acoja la mayoría de los usos deportivos y lúdicos, y a medida que se avance hacia el sur la dehesa presente un aspecto más natural.
Los primeros estudios proponen que la franja del parque pegada a Sevilla absorba las instalaciones deportivas con las que ahora cuentan los terrenos del Charco de la Pava, adonde el Ayuntamiento tiene previsto trasladar la Feria de Abril. La idea es que haya campos de fútbol y pistas polideportivas, pero siempre que sean instalaciones descubiertas y se eviten construcciones y grandes equipamientos que distorsionen el aspecto natural del parque.
Asimismo, los técnicos barajan conservar la pista del antiguo aeródromo de Tablada para recordar el pasado de la dehesa, pero también para dar cabida a actividades como aeromodelismo, parapente, ultraligeros y, se estudia incluso la posibilidad de permitir vuelos con avioneta. En el interior de la dehesa se distribuirán varias zonas de arboleda, juegos infantiles, caminos para correr y hacer senderismo y rutas para montar a caballo.
El Ayuntamiento planea construir junto a la Carretera de la Esclusa unas nuevas cocheras para los coches de caballo que funcionan como servicio público. La idea es que este nuevo espacio no sea sólo un aparcamiento para el centenar de carruajes que diariamente trabajan en la capital, sino un centro con diversas actividades hípicas, cuadras y servicios para atender a los caballos.
El extremo sur de Tablada, el más alejado de la capital, será un paraje natural, esa "puerta de Doñana" de la que tanto se ha hablado desde el gobierno municipal. Los planes pasan por que esta franja sea un gran humedal, casi una zona de marismas donde vivan, sobre todo, distintas especies de aves y que se mantenga con la estación depuradora de aguas residuales que hay junto al puente que une Sevilla con el Aljarafe.
Uno de los usos que descartan los primeros estudios es el de construir un campo de golf, una posibilidad de la que se había hablado para el futuro parque. Los técnicos por ahora desaconsejan esta opción porque su mantenimiento precisa demasiada agua y distorsionaría la idea de espacio natural.
El futuro parque, de más de 356 hectáreas, tendrá diferentes puntos de acceso, aunque la entrada oficial estará en la localidad de San Juan de Aznalfarache. Allí habrá una boca de metro que desembocará en el centro de acogida de Tablada, donde se explicarán los contenidos del parque y desde donde partirá un barco que llevará hasta la dehesa a través del río Guadalquivir.
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