Detenidos otros cuatro sospechosos

Nuevo golpe contra los supuestos implicados en el triple homicidio de la calle de Sánchez Preciado, en el barrio de Valdezarza. Agentes de Homicidios han detenido en las últimas horas a la dueña del bar Dorita, situado a pocos metros de la casa de las víctimas, como supuesta inductora del triple crimen. También han sido arrestadas otras tres personas, amigas del presunto autor material, David R. V., alias El Paleta, de 25 años, como supuestos encubridores. La policía no descarta hacer más detenciones en las próximas horas, según señalaron fuentes del caso.

La clave fundamental para estas nuevas detenciones ha sido la declaración de Francisco Javier P. G., El Patata, de 27 años, ante los investigadores policiales. Este amigo de El Paleta fue detenido el pasado fin de semana en su domicilio, en el distrito de Tetuán. Sin embargo, en sede policial negó las acusaciones que pesaban sobre él de que había acudido junto al supuesto autor material a la casa de Amalio, en la calle de Sánchez Preciado. Sólo reconoció que le había prestado su coche, un Renault 19, con el que fue El Paleta a matar a la familia compuesta por Amalio.

A partir de ahí, el caso pegó un nuevo giro. Su declaración permitió reconstruir las horas previas y posteriores al triple crimen. Y hubo sorpresas. En primer lugar, El Paleta se pasó toda la tarde previa al crimen en el bar Dorita, que está junto al instituto de la Paloma.

El bar es regentado por Yolanda (conocida como Yoli en el grupo) y por su pareja, Daniel. Fue la primera la que empezó, según las investigaciones, a calentarle la cabeza a El Paleta. Supuestamente, le habían pasado unas dosis muy adulteradas de cocaína y la propia Yoli le dijo que eso no debía de quedarse así, sino que debía ir a casa de Amalio y hacerse con el estupefaciente que tuviera allí. De hecho, la policía cree que el cuchillo usado en la refriega fue cogido por El Paleta en el bar de Yoli.

Eso, unido al alcohol que El Paleta consumió durante toda la tarde, hicieron que fuera directamente al número 33 de la calle de Sánchez Preciado, que está a menos de 300 metros del bar. Pero aquí saltó la novedad.

El que le acompañaba en el coche no era El Patata, como pensó la policía en un primer momento. Éste tan sólo dejó su coche. Quien le acompañaba en el turismo era un tal Emilio, que se quedó dentro mientras El Paleta asesinaba, presuntamente, a los moradores de la casa baja.

Emilio se quedó estupefacto cuando vio salir de la vivienda a El Paleta: iba manchado de sangre, con un cuchillo en la mano y visiblemente nervioso. Se subió al coche y le dijo que arrancara y se marcharan pronto del lugar.

El Patata también se enteró de lo sucedido desde los primeros momentos. Cuando le devolvieron el coche, le dijeron que lo limpiara porque tenía manchas de sangre, aunque él no llegó a hacerlo.

La policía también investiga si su amigo le dio el cuchillo empleado en el crimen. Por este motivo, también será acusado de encubridor del triple homicidio.

En casa de Yoli

Después de haber cometido los asesinatos, El Paleta se dirigió a casa de Yolanda y de Daniel, a los que contó lo que acaba de hacer. En la casa, también se encontraba la hermana de Yoli, que a la vez es novia de Emilio. A Yoli, la policía la acusa de inductora del triple homicidio, mientras que el resto pasará hoy a disposición judicial con los cargos de encubrimiento.

Los agentes de Policía Científica están analizando estos días las manchas de sangre halladas en el vehículo de El Patata, ya que éste no las llegó a limpiar. También estudian si los restos de sangre halladas en algunas prendas del supuesto homicida corresponden a Amalio, a su esposa o a su hijo.

La juez de Torrevieja (Alicante) que ordenó la detención de El Paleta el pasado domingo, dictaminó ayer su ingreso en la prisión de Fontcalent, en la provincia alicantina. Fuentes policiales esperan que la magistrada se inhiba en favor del juzgado número 40 de Madrid, que instruye las diligencias por los asesinatos del barrio de Valdezarza. El titular de este juzgado ha ordenado el secreto del sumario.

Cuando David R. V., El Paleta, fue detenido en una urbanización de lujo próxima a la Torre del Moro, en Torrevieja, en la localidad no sólo le esperaba la policía. También seguían su rastro varios familiares del difunto Amalio. Por suerte para él, los agentes lo encontraron primero.