Estudiantes saca la cabeza

Estudiantes ya ha encadenado dos victorias seguidas. Es la primera vez en lo que va de temporada que lo consigue. Aunque, en competiciones diferentes. Ayer, con la marejada de fondo de la crisis en su consejo de administración -dividido en facciones-, el equipo madrileño se impuso al Partizan de Belgrado, un histórico muy venido a menos. Tanto, que su mayor estrella es un Gurovic -ex del Barcelona y del Unicaja- lento y fallón.

Pepu Hernández, el técnico de Estudiantes, quiso que sus chicos "corrieran la cancha". Y sus chicos se aplicaron a correr. Al principio, sin mucha cabeza. Poco a poco, y gracias al desacierto contumaz de los serbios, con más frecuencia y tino. También mejoraron en agresividad e intensidad defensiva, cerrando mejor el rebote y favoreciendo así las transiciones rápidas.

Los colegiales partían con la preocupación de no poder contar con el lesionado Rafa Vidaurreta -padece una rotura parcial del ligamento interno de la rodilla- y, por lo tanto, de tan sólo contar con dos jugadores en la zona interior: Garcés y Patterson. De hecho, en muchas fases del encuentro Carlos Jiménez tuvo que actuar de segundo pívot.

La dirección se la alternaron Sergio Rodríguez y Azofra. Ambos muy veloces. Pero con más atrevimiento el joven canario. Incluso, demasiado. A ellos se les sumaron Iturbe y Loncar, ambos acertados en el tiro. Mientras, los jugadores del Partizan rozaban el ridículo en sus porcentajes de tiro, tanto de dos como de tres puntos. Tampoco es que Estudiantes mostrase un acierto demoledor, pero sí lo bastante como para ir poniendo tierra de por medio.