La lluvia provoca 140 kilómetros de atascos en los accesos a la capital

La lluvia caída ayer durante todo el día colapsó las carreteras de acceso a la capital durante buena parte de la mañana. Sumaron hasta cerca de 140 kilómetros de retenciones. Las autovías de entrada a Madrid se convirtieron en una ratonera para los conductores, que tuvieron que soportar atascos de horas. Los accidentes de tráfico se duplicaron con respecto a un día sin lluvia, según un portavoz de Emergencias 112. La mayoría se debió a alcances de chapa sin mayores consecuencias, salvo un conductor que resultó herido grave en la A-23 (eje de O'Donnell).

A las diez de la mañana de ayer, las principales carreteras de la red vial de la Comunidad de Madrid presentaban 137 kilómetros de retenciones, principalmente ocasionadas por la incesante lluvia que durante toda la noche y primeras horas del día cayó sobre la región. Los mayores problemas de tráfico estaban en la M-40, que tenía 26 kilómetros de atascos; en la autovía de Barcelona (A-2), que registraba 14 kilómetros de circulación densa a su paso por San Fernando de Henares, y en la M-45, con 17 kilómetros de retenciones. El resto de vías también sufría fuertes retenciones.

Según un portavoz de Emergencias 112, la región registró 150 accidentes hasta las seis de la tarde. El más grave ocurrió en el túnel de O'Donnell, donde un hombre de 37 años resultó herido grave a las diez de la mañana al chocar tres turismos en un alcance. Sufría un traumatismo torácico y a la llegada de los facultativos del Samur-Protección Civil se encontraba inconsciente. Fue trasladado al hospital Gregorio Marañón, donde quedó ingresado.

La capital registró 67 accidentes de tráfico hasta las 19.30, mientras que los bomberos de Madrid efectuaron 69 salidas relacionadas con la lluvia.