Las franquicias se fijan en el extranjero

El principal reto del mercado español de la franquicia es su internacionalización. Se trata de un mercado maduro que el año pasado facturó 13.900 millones de euros, lo que supone un 16,8% más que el año anterior, según un informe de la Asociación Española de Franquiciadores (AEF). El número de enseñas creció un 2,5%, lo que supone un cambio de tendencia con respecto al año 2002.

El sistema de franquicia está plenamente consolidado en España. El reto ahora es la proyección internacional, un reto que las empresas afrontan con la confianza de poder ofrecer una clase de negocio que genera muchos puestos de trabajo y que tiene continuidad.

"La principal dificultad para crecer es la escasez de locales y la subida de las rentas", subraya el presidente de los franquiciadores

Entre los destinos más exóticos de las firmas españolas está Oriente Próximo. En 2002, desembarcaron en nueve países de la zona

"Las cifras muestran que el sistema de la franquicia en España sigue evolucionando de forma muy favorable: la facturación representa ya más del 10% del total de volumen de negocio que generó el comercio minorista en España y el número de marcas que operan ha vuelto a crecer", explica Xavier Vallhonrat, presidente de la Asociación Española de Franquiciadores (AEF) y principal organizador del decimoquinto Salón Internacional de la Franquicia, las Oportunidades de Negocio y el Comercio Asociado (SIF&CO), celebrado la pasada semana en Valencia. Con más de 40.000 visitantes, 370 firmas y participación de enseñas de Estados Unidos, Francia, Grecia, Italia, Portugal y el Reino Unido, la vocación internacional del salón es clara.

Según el informe de la AEF, de los 13.900 millones de euros que facturaron las franquicias el año pasado, el 70% corresponde a establecimientos franquiciados, y el 30%, a establecimientos propios. El número de franquiciadoras se incrementó en España un 2,5%, hasta alcanzar las 650. De ellas, el 81% (531) son españolas y el resto tiene origen en otros países, fundamentalmente en Francia, Estados Unidos e Italia.

El Código Europeo de la Franquicia considera empresa franquiciadora a toda entidad que corresponda a un concepto de negocio probado a través de centros piloto; posea un conocimiento propio, diferenciado y transmisible; ostente la propiedad o licencia de uso de las marcas y tenga la capacidad de dar formación y asistencia técnica a sus franquiciados.

"Las centrales de franquicia se están convirtiendo en auténticos motores empresariales, generando recursos, inversiones y valor", asegura Eduardo A. Tormo, director general de Tormo & Asociados. Para este consultor, "la franquicia española ha iniciado con éxito su salida al exterior, y en este sentido sus principales mercados están siendo Europa, los países del Este, e Iberoamérica; si bien las últimas dificultades que atraviesan estos países han paralizado muchos proyectos".

En cualquier caso, tal y como recoge un informe elaborado por esta consultora y que edita Franquicias Hoy, antes de abordar la expansión internacional cualquier empresa debería tener en cuenta los siguientes factores: debe contar con una sólida estructura en España; disponer de personal especializado y un director internacional; hacer una prospección del país de destino y un análisis de la legislación, potenciales competidores, etcétera; constatar la viabilidad y empezar con un centro piloto; promocionar la marca, y, una vez testada la aceptación del negocio, acelerar su expansión. Para alcanzar el éxito resulta fundamental tener buenas ideas, de calidad, algo que, según las fuentes consultadas, no falta en España.

De los destinos más exóticos escogidos por las firmas españolas destaca Oriente Próximo. El pasado ejercicio desembarcaron en nueve países, con 246 establecimientos, sobre todo de moda, constata el informe de Tormo. En Europa destaca Portugal, donde se encuentran 96 empresas, con 1.554 establecimientos, casi el 40% del total.

Locales por las nubes

La franquicia es una forma de autoempleo no exenta de problemas. El más importante sigue siendo la financiación y todo lo relativo a los locales necesarios. El informe de la AEF revela que en la actualidad existen 42.554 establecimientos de empresas franquiciadoras, un 11% más que en 2002. De ellos, el 78% son franquiciados y el 22% son propios.

La franquicia empleó el año pasado a 186.000 profesionales, de los cuales el 73% trabaja en locales franquiciados, y el 23%, en locales propios. "Estamos hablando de una fórmula comercial que genera muchos puestos de trabajo, ya que la continua puesta en marcha de establecimientos supone la creación permanente de puestos. De hecho, en los últimos dos años se ha incrementado en un 21% el número de profesionales empleados", señala Vallhonrat.

"En estos momentos, la principal dificultad que está encontrando el sector para crecer es la escasez de locales y, en consecuencia, la subida de las rentas por efecto del aumento de la demanda y reducción de la oferta. A esta situación, el sector está respondiendo con diversas soluciones, como la creación de modelos de negocio que requieran espacios más reducidos o que puedan vivir en calles de segundo nivel", subraya Tormo. Esta preocupación es compartida por Vallhonrat, quien considera que "en la actualidad, los contratos de alquiler de locales en los centros comerciales incluyen requisitos que consideramos demasiado exigentes para un operador medio. Hablamos de alquileres altísimos, compromisos de alquiler por varios años, exigencia de avales, etcétera. Nuestra propuesta desde la AEF es que se revisen esos contratos y se establezcan unas condiciones más sensatas".

El presidente de los franquiciadores añade que "en la actualidad hay una gran dificultad para encontrar lugares en zonas estratégicas con las dimensiones adecuadas y con una relación calidad-precio razonable".

Con respecto al origen de las centrales franquiciadoras, por comunidades destacan Cataluña, con 212 enseñas, y Madrid, con 206. Les siguen a distancia la Comunidad Valenciana, Andalucía, Galicia y País Vasco. Por facturación, Madrid ocupa el primer lugar, ya que concentra el 42% del volumen, por delante de Cataluña, Baleares, Andalucía y la Comunidad Valenciana.

En cuanto a los sectores, continúa líder hostelería y restauración, con 103 franquiciadoras que generaron 3.311 millones de euros. A continuación se sitúan alimentación (19 enseñas y un volumen de negocio de 3.265 millones de euros) y confección, y moda y complementos (136 enseñas y una facturación de 1.430 millones de euros). El informe de la AEF clasifica a las empresas en 23 sectores. "En general se puede decir que los tres principales sectores continúan creciendo, y todo indica que veremos nuevas fórmulas y conceptos de negocio, puesto que existe mercado", afirma Tormo.