Sin expectativas

Las rápidas fluctuaciones de los precios en el mercado del petróleo han sembrado el desconcierto entre los inversores en renta variable, que no parecen esperar nada bueno de tanta volatilidad.

La actividad en la Bolsa española discurrió con cierta normalidad a lo largo de la mañana para unirse a los bandazos de la Bolsa estadounidense en el tramo final de la sesión.

De poco sirvió que el IPC de la zona euro descendiera dos décimas en el último mes o que los institutos económicos alemanes revisaran al alza sus previsiones sobre el crecimiento económico en ese país hasta situarlas en el 1,8%, tres décimas por encima del informe anterior. Los inversores estaban pendientes del petróleo y de la reacción de Wall Street ante el desarrollo de la campaña electoral.

La apertura a la baja de la Bolsa de Nueva York, al mantenerse el petróleo Texas por encima de los 50 dólares por barril, acabó con cualquier conato de mejora en los mercados europeos, que terminaron ofreciendo otra sesión plana y con unos volúmenes relativamente bajos.

El Ibex 35 terminó con un avance del 0,07% apoyado, sobre todo, en los valores bancarios, mientras que el índice general de la Bolsa de Madrid avanzó el 0,03%. La Bolsa de París cerró con un descenso del 0,30% y Francfort perdía el 0,18%, mientras que la Bolsa de Londres se anotó una subida del 0,08%.

La contratación en el Mercado Continuo descendió respecto del pasado viernes hasta situarse en 1.945,42 millones de euros, de los que algo más de 500 millones procedían de operaciones institucionales.

Casi coincidiendo con el cierre de las bolsas europeas llegaron las realizaciones de beneficios en el mercado del petróleo y el Texas caía hasta 48,50 dólares por barril, con lo que la Bolsa de Nueva York remontó posiciones y a media sesión mostraba un avance del 0,16%.

Los últimos datos económicos y la posibilidad de que se mantenga la misma política tras las elecciones no daban para más.