De mayores, Humanidades

"No queremos ningún título, sólo seguir aprendiendo", afirma María Luisa Mataix, de 64 años, y presidenta de la Asociación de Alumnos de la Universidad Permanente de Alicante, una iniciativa destinada a personas mayores de 50 años con inquietudes socioculturales. Este curso mil personas mayores se han matriculado para cursar algunas de las 89 asignaturas que se ofertan. El viernes pasado se celebró la ceremonia inaugural de la actividad lectiva, en la que se entregaron los diplomas a los 20 alumnos de la primera promoción que han completado con éxito las 18 asignaturas del programa. Al acto, acudieron los ex rectores, Andrés Pedreño y Salvador Ordóñez.

Una de las particularidades de la Universidad Permanente es la devoción y preferencia que los alumnos tienen por las Humanidades. El curso pasado 1.042 alumnos se matricularon en asignaturas de esta área, lo que representa el 49% del total. Y un 24% (516) estudiaron asignaturas relacionadas con la informática, imagen y sonido. Sus asignaturas favoritas son la historia, el arte y la literatura, "y todo aquello relacionado con los cambios sociales, cómo se han producido y las consecuencias que han tenido", explica la profesora Concepción Bru, directora de la Universidad Permanente, quien establece una "dualidad" en los intereses de estos alumnos que les gusta comparar el presente y el pasado, cómo era la vida antes y cómo es ahora. "La literatura y la historia son muy interesantes, también es mérito de los profesores hacer atractiva la materia", agrega la alumna María Luisa Mataix. Casi la mitad de los alumnos tienen entre 51 y 60 años, luego el grupo más numeroso se sitúa entre los 61 y 70 años. Entre ellos hay un ambiente de armonia y compañerismo, su único objetivo es seguir aprendiendo, sentirse útiles y conocer más. Quizá por este motivo, las ciencias técnicas y las asigntatuuras prácticas queden relegadas a un segundo plano, recobrando un gran protagonismo las humanidades. "Aquí encontramos a gente con las mismas inquietudes, nos relacionamos, ocupamos el tiempo libre y aprendemos. Todo ello nos permite seguir creciendo como personas", explica la representante de los alumnos. El viernes pasado se graduó la primera promoción de Diplomados Senior que iniciaron sus estudios en el año 2000 en una iniciativa que persigue el fomento de las relaciones intergeneracionales, para mejorar la calidad de vida de las persomas mayores y fomentar su participación.

"Encontramos gente con inquietudes, aprendemos y nos permite seguir creciendo como personas"

Cada año, los alumnos se matriculan entre 1 y 6 asignaturas, para al final completar las 18 asignaturas totales, y conseguir el título de Diplomado Senior, que en realidad no tiene, en el caso de Alicante por el momento, ninguna validez práctica. "Estamos ultimando, al igual que ocurre en otras universidades, una propuesta para que puedan convalidar este título por el certificado de acceso de mayores de 25 años", explica Concepción Bru, quien matiza que el reconocimiento del título es "académico, no profesional". Pero les podrá servir para iniciar estudiar universiarios. "Hay compañeros que la palabra Universidad les da miedo, sin embargo aquí tenemos un control de asistencia y algunos trabajos escritos, pero exámenes no", apunta la alumna, "a estas alturas de la vida ya hemos demostrado", ironiza.

Una de las ventajas del programa de la Universidad Permanente en Alicante es la libertad del alumno para poder elegir las asignaturas que quiera. "El plan de estudios es individual, cada uno se matricula en lo que le interesa, no tiene unas asignaturas obligatorias", comenta la profesora Bru, que destaca la amplia oferta de asignaturas, en total 89, de las que cada alumno puede cursas un máximo de 6 por curso, con una duración mínima de 40 horas lectivas. Al final del programa se deben cursar en total 720 horas. Las clases de cada asignatura se distribuyen entre 2 y 3 días alternos a la semana, preferentemente en horario de 5 a 8 de la tarde. Las clases se imparten en la Sede de la Universidad de Alicante en el paseo de Canalejas, en el centro de la ciudad, también en el campus de Sant Vicent (Aulario I y III), así como en las sedes que la Universidad tiene en las poblaciones Benissa, Cocentaina y Biar, así como en los Ayuntamientos de La Vila Joiosa, Callosa d'En Sarrià y Xàbia, donde aunque en estos últimos la universidad carece de sedes, los Ayuntamientos se comprometen a dotar del espacio físico necesario y de los medios materiales para poder impartir las clases.

"Hay una demanda creciente por parte de los municipios, y nosotros este año como novedad ofertamos también cursos allí para poder atenderla", explica Bru. Mataix se lamenta que la sede del centro de Alicante "se quede pequeña, hace falta más espacios en el centro de la ciudad para dar estos cursos", ya que es la zona en la residen más personas mayores, que aguardan con especial interés la posible cesión del edificio de la antigua sede de Correos, situada en la plaza Gabriel Miró.

El precio de la matrícula es "asequible" y el profesorado que imparte los cursos es de la propia Universidad, "además tenemos derecho a becas como los jóvenes", recuerda Mataix que exhibe orgullosa su tarjeta universitaria que le concede los mismos derechos que a cualquier alumno. En esta edición, los matriculados en la Universidad Permanente tendrán acceso al campus virtual, donde podrán acceder a su expediente, obtener apuntes y realizar consultas. Para facilitar su trabajo han realizado un curso preparatorio intensivo que han cursado 400 alumnos.