_
_
_
_
_
Crónica:MOTOCICLISMO | Gran Premio de Qatar
Crónica
Texto informativo con interpretación

Rossi se cae y Sete le disputa el título

Triunfo vital del español, ante la fatalidad que rodeó al italiano, mientras Xaus, tercero, sube por primera vez al podio

Ramon Besa

Acostumbrado a que le pidan explicaciones cuando llega el segundo, Sete Gibernau (Honda) se mostraba ayer radiante después de ganar en Qatar y constatar que los periodistas preguntaban por Valentino Rossi (Yamaha). "Ya era hora de que un día la suerte estuviera de mi parte", observó el catalán, que en una carrera ha recuperado sus opciones al título: les separan 14 puntos y quedan 75 en juego. La jornada victoriosa de Gibernau coincidió con un día calamitoso para Rossi, al que le fatalidad persiguió desde que llegó al circuito.

El italiano partió desde la última posición, el pit lane, juntamente con su compatriota Max Biaggi (Honda) -castigado por el mismo motivo-, después de ser penalizado con seis segundos por comportamiento antideportivo. Resulta que en la noche anterior a la carrera un miembro de su equipo realizó una serie de derrapajes con la rueda trasera de su escúter en un intento de dejar la goma marcada en la posición de salida que debía ocupar Rossi, la octava, para que así su moto tuviera más agarre y tracción. La organización descubrió el truco y mandaron al quintuple campeón a la cola: 23º. Rossi ni se inmutó: llegó el noveno al final de la primera recta y era octavo tras el primer giro, séptimo en el segundo y quinto en el tercero. Hasta que se cayó en el sexto por un error, rápido como iba, ansioso como estaba por dar con la cabeza, forzado en un circuito muy exigente -tanto para el piloto como para los neumáticos y el motor-, en el que salirse de la trazada significaba rendirse porque la pista estaba llena de polvo por la arena.

Más información
Los otros
Porto domina de punta a punta y Pedrosa es segundo
Un final de película

La moto de Rossi pisó la hierba artificial y, acto seguido, se fue al suelo para suerte de Gibernau, que sólo se apercibió de la retirada del italiano cuando vio a su Yamaha al lado del circuito: "Había advertido a mi equipo que no quería ninguna referencia". Desde que superó a Carlos Checa (Yamaha) después de la primera vuelta, Gibernau gobernó la carrera con precisión, dispuesto a irse desde la salida, sabedor de que Rossi iba rezagado y podía lanzar de nuevo su candidatura al título. Impecable, sin cometer un error -"me sentía presionado por el mal resultado de Motegi", explicó, "y por eso intenté rodar muy concentrado en un intento de hacer una carrera perfecta"-, el español sólo fue inquietado en la distancia por su compañero de equipo, Colin Edwards (Honda), que se situó a menos de dos segundos. "Si hubiera ido a tope, no sé si habría alcanzado a Sete, pero ése no era el caso", respondió el estadounidense, sin especificar si había recibido órdenes de su equipo para no competir contra él y conformarse con repetir el segundo puesto que ya obtuvo en Donington. Gibernau acabó por imponerse sin discusión en prueba de resistencia y en la que los adelantamientos fueron muy complicados.

La carrera tuvo, por lo demás, un notable color español, con tres pilotos en los tres primeros puestos en el inicio: Checa, Gibernau y Rubén Xaus (Ducati). Checa, que partió en la pole-position, tuvo que retirarse a tres vueltas del final por un problema en la bomba de gasolina de su moto después de que se hubiera consolidado como tercero pese a los problemas de velocidad y estabilidad de su Yamaha. El abandono del catalán posibilitó el exito de Xaus, que, por vez primera, alcanzó el podio tras su éxito el año pasado en superbikes y haber sido el más rápido en los primeros entrenamientos en Doha. "Quedar tercero ha sido muy bonito", afirmó; "me falta moto y presupuesto, pero lo suplo con las ganas de correr. Vamos a insistir".

La victoria de Gibernau en la MotoGP, la cuarta del año, y el tercer puesto de Xaus coronaron una jornada excepcional para el motociclismo español, que conquistó cinco peldaños del podio de los nueve posibles, después de los éxitos de Jorge Lorenzo y Álvaro Bautista en 125cc -primero y tercero-y el segundo de Dani Pedrosa en 250cc.

La próxima cita, en Sepang, se anuncia preciosa tal y cómo han quedado las clasificaciones.

Sete Gibernau (en el centro), Rubén Xaus (a su derecha) y el estadounidense Colin Edwards, felices en el podio.
Sete Gibernau (en el centro), Rubén Xaus (a su derecha) y el estadounidense Colin Edwards, felices en el podio.ASSOCIATED PRESS

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Ramon Besa
Redactor jefe de deportes en Barcelona. Licenciado en periodismo, doctor honoris causa por la Universitat de Vic y profesor de Blanquerna. Colaborador de la Cadena Ser y de Catalunya Ràdio. Anteriormente trabajó en El 9 Nou y el diari Avui. Medalla de bronce al mérito deportivo junto con José Sámano en 2013. Premio Vázquez Montalbán.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_