El Consell apuesta ahora por la promoción del calzado tras el estallido social de Elche

Tres semanas después del estallido social en Elche que concluyó con el incendio de dos naves de almacenistas chinos en el polígono industrial del Carrús, el presidente de la Generalitat y sus consejeros de Economía y Empresa acordaron con el presidente de la patronal de Alicante y el presidente de los fabricantes de calzado acciones específicas para abordar "un problema objetivo" derivado de la globalización comercial: la pérdida de puestos de trabajo en el sector. El Consell asumirá medidas de promoción del calzado; la patronal, el contrato de los excedentes laborales.

"China es más una oportunidad que un problema pero hay que cumplir las leyes"

Rafael Calvo, presidente de la Federación de Industrias del Calzado Español y de la paralela organización de ámbito europeo, puso sobre la mesa el "problema objetivo" que atraviesan todos los fabricantes europeos: la pérdida de puestos de trabajo y la necesidad de "reducir la incidencia de la mano de obra" en los costes de producción para salvar la "coyuntura" actual. Calvo subrayó que "el sector tiene futuro en términos de estructura industrial y de empresas capacitadas para liderarlo", pero agradeció a la Generalitat las acciones específicas pactadas ayer superar los problemas presentes.

Francisco Camps, presidente de la Generalitat, detalló cuatro líneas de acción. Los presupuestos de 2005 elevarán las partidas destinadas a la promoción exterior del calzado español para garantizar la presencia de los fabricantes valencianos en Estados Unidos, Alemania y Rusia, entre otros destinos.

La Generalitat se implicará en campañas de publicidad para recuperar "el mercado español". "España consume mucho", explicó Camps, "pero la mitad del calzado que se compra procede del exterior". El fomento de la "presencia" de los fabricantes españoles en el mercado nacional es invertir esa tendencia.

El presidente anunció también contratos programas específicos para garantizar la formación profesional en el sector, la revisión de las líneas de formación ocupacional para adaptarlas a las necesidades reales de los fabricantes y un fuerte impulso para el instituto tecnológico y los centros de empresas innovadoras vinculados al calzado.

La cuarta iniciativa concreta que anunció el presidente y que ya había avanzado a mediodía el consejero de Empresa, Justo Nieto, es la apertura con carácter permanente de un servicio de atención directa a los empresarios en el centro de empresas innovadoras de Elche. El servicio está dirigido a todos los pequeños empresarios y pretende analizar cada caso concreto para para que cada patrono sepa optar a las ayudas que tiene a su disposición.

Los consejeros de Economía y Empresa, además, constituyeron una comisión de trabajo con los responsables de la patronal alicantina y el presidente de los fabricantes para tratar con los alcaldes de las localidades donde el sector tiene más presencia; con el rector de la universidad Miguel Hernández de Elche; o con la Delegación del Gobierno las necesidades de los industriales del calzado.

Rafael Calvo subrayó los problemas derivados de la "actitud" general de los funcionarios de aduanas y de los responsables de las inspecciones de trabajo. El presidente de los fabricantes europeos aseguró que el problema se extiende a toda Europa y que el Parlamento Europeo intenta paliar la situación. Pero también insistió en atribuir el "problema de orden público" registrado en Elche hace tres semanas a "la especial idiosincrasia de determinados sectores" asentados en la localidad. "China es más una oportunidad que un problema", sentenció, "lo que exigimos es que se cumplan las leyes y los acuerdos comerciales pactados".

Joaquín Rocamora, presidente de Coepa, por su parte, garantizó que en la provincia de Alicante "hay capacidad, ganas, potencia económica y bonhomía suficiente para captar la mano de obra excedente del calzado en otros sectores".