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Una empresa estatal gestionará durante 20 años las infraestructuras de la Copa del América

Salinas dice que dejará la dirección del consorcio si es el obstáculo para llegar a acuerdos

El Gobierno aportará 500 millones de euros para pagar las infraestructuras de la Copa del América en Valencia. De ese total, espera recuperar 300 millones con la creación de una sociedad instrumental que gestione la explotación, directa o mediante concesiones, de las infraestructuras del Balcón al Mar durante 20 años. Ayer, por otra parte, José Salinas, director general del Consorcio Valencia 2007, se mostró dispuesto a dejar su cargo si él es el obstáculo que dificulta acuerdos, según dijo la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, en rueda de prensa, y confirmó el propio Salinas. El Gobierno quiere relevar a Salinas y la alcaldesa se resiste a ceder la gestión del Balcón al Mar, su proyecto emblemático.

"Los problemas políticos deben ser resueltos por los políticos", dijo Bonnefous

El acuerdo sobre el plan de financiación de las obras de la Copa del América prevé que el Gobierno aporte, a través de préstamos del Instituto de Crédito Oficial (ICO), 500 millones de euros. La intención es que el Ejecutivo central pueda recuperar algo más de la mitad de ese total, en concreto 300 millones, según fuentes gubernamentales. La fórmula será la creación de una sociedad instrumental que gestione durante dos décadas las infraestructuras creadas para la competición, que conformarán el Balcón al Mar. Los 200 millones restantes serán sufragados, a partir del año 2006 por los presupuestos del Estado.

El Gobierno descarta recalificar terrenos del Puerto de Valencia salvo los ya comprometidos para el Balcón al Mar.

Pese a que esas líneas generales se acordaron en julio, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, dijo ayer tras la firma de un convenio entre Ford España y ACM, la empresa que detenta los derechos de la regata, que su mayor preocupación es "conocer el plan de financiación" para la Copa. Barberá insistió en que es momento de sentarse a hablar con el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, y con el consejero de Economía, Gerardo Camps, para "establecer los criterios de actuación y gestionar las obras".Rita Barberá se resiste a perder el control sobre la gestión de las infraestructuras que se realicen en el Puerto de Valencia con motivo de la Copa del América. El acuerdo sobre la financiación de las obras, sin embargo, contempla una inversión del Gobierno de 500 millones de euros. Más de la mitad de esa cantidad volvería a las arcas del Estado a través de la creación de una empresa instrumental que gestionara las infraestructuras construidas durante 20 años. El plan no contempla la recalificación de los solares del puerto de Valencia, excepción hecha de los previstos ya para el Balcón al Mar. La creación de esta sociedad, en la práctica, deja a Rita Barberá fuera de la gestión de esta infraestructura, uno de sus proyectos estrella.

Ayer, en rueda de prensa, la alcaldesa de Valencia defendió la conveniencia de sentarse a establecer los "criterios de actuación y gestionar las obras" con el ministro de Administraciones públicas, Jordi Sevilla, y con el consejero de Economía, Gerardo Camps. La alcaldesa fue más allá y también aseguró que su mayor preocupación es "conocer el plan de financiación" para la Copa del América.

El Consorcio Valencia 2007 aprobó, a finales de junio, una primera provisión de 122,9 millones de euros para las obras del puerto y de la dársena. De ese total, un préstamo de 98,9 millones suscrito por el Instituto de Crédito Oficial (ICO) servirá para arrancar con las obras. En la misma reunión, el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, planteó a la Generalitat y al Ayuntamiento de Valencia la creación de una entidad instrumental para la ejecución de las obras y ofreció a las dos administraciones la posibilidad de participar en la misma.

Ayer, además, se conoció que la aportación para 2005 que realizará el Gobierno para pagar el canon que las tres administraciones entregarán a ACM por organizar en Valencia la competición de vela, es de seis millones de euros. El canon a pagar en total es de 90 millones de euros, un 40% de los cuales corren a cargo del Gobierno, la misma cantidad que tendrá que pagar el Consell, y el 20% restante lo sufragará el Ayuntamiento de la ciudad.

Ayer también se habló de otro de los puntos de desacuerdo dentro del Consorcio Valencia 2007. El Gobierno quiere una mayor representación en este organismo, acorde con el esfuerzo económico que realizará para la celebración de esta competición en Valencia. En este contexto, se ha cuestionado la continuidad de José Salinas, director general del consorcio y hombre de confianza de Rita Barberá. Ayer, José Salinas, director general del Consorcio de la Copa del América, se mostró dispuesto a dejar su cargo si él es el obstáculo que dificulta los acuerdos, según aseguró la alcaldesa de Valencia en una rueda de prensa. El propio Salinas ha reconocido en privado su disposición a abandonar su cargo en el consorcio.

Barberá aseguró, por otro lado, que no hay parón en las obras y que todas las que debían estar construidas o adjudicadas este año lo están.

También continúan los acuerdos con los que serán patrocinadores oficiales de la competición de vela. Ayer, Ford España y ACM, empresa organizadora de la Copa del América, firmaron un convenio por el que la firma automovilística se convierte en coche oficial del evento -proveerá de servicios de transporte durante el evento- y copatrocinadora.

El acuerdo se firmó en el Salón de Cristal del Ayuntamiento de Valencia y en él participó el presidente de Ford España, Manuel Machado.

El presidente de ACM, Michel Bonnefous, no quiso pronunciarse sobre cuestiones extradeportivas. "Los problemas políticos deben ser resueltos por los políticos", dijo Bonnefous, quien añadió que existen las condiciones necesarias para hacer una competición "fantástica".

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