La división es cada vez mayor entre los concejales del equipo de Díaz Alperi
El futuro del solar de la Tabacalera enfrenta ahora a los seguidores del alcalde y de Ripoll
El destino que el Ayuntamiento de Alicante dará al solar que ocupaba la antigua fábrica de tabacos de esa ciudad abrió ayer una nueva brecha entre el alcalde, el popular Luis Díaz Alperi, y varios de los concejales de su gobierno enfrentados a él y afines al presidente de la Diputación, José Joaquín Ripoll. Mientras Alperi aseguró que todavía "no está decidido" el uso de ese suelo, el portavoz del PP y la edil de Hacienda indicaron que el convenio con Altadis (antigua Tabacalera) deja muy claro que el terreno ha de destinarse a la creación de una gran zona verde.
"Sería tremendo" que el suelo de Tabacalera se destinara a un uso distinto al que figura en el acuerdo de permuta entre Altadis y el Ayuntamiento de Alicante, comentó el portavoz del PP municipal, Pedro Romero, tras conocer que el alcalde, Díaz Alperi, había afirmado que el destino del terreno está aún por decidir.
A mediodía de ayer, el alcalde informó de que la Junta Local de Gobierno había dado un paso más en la permuta con Altadis (cesión de parcelas municipales edificables a la antigua Tabacalera a cambio de los terrenos de ésta en el caso urbano), un paso que permitirá al Consistorio disponer en breve plazo de los terrenos de la antigua fábrica de tabacos, casi 30.000 metros cuadrados de gran valor inmobiliario.
Según Díaz Alperi, sólo una pequeña parte del suelo, el ocupado por el edificio emblemático de la antigua Tabacalera, que está protegido, tiene decidido su uso: museo de la Semana Santa. Pero en el resto de la parcela, de unos 27.000 metros cuadrados, "no hay nada decidido", salvo la construcción de un viario "importante" que unirá la zona con la céntrica avenida de Alfonso El Sabio.
Diez minutos después de la intervención del alcalde compareció el portavoz del gobierno local, Pedro Romero, junto a la concejal de Economía y Hacienda, Rosana Cremades, ambos adscritos a la facción de José Joaquín Ripoll. Y a diferencia de lo dicho por el alcalde, Cremades aseguró que en el convenio con Altadis figura explícitamente que los terrenos que rodean al edificio central serán dedicados a parques, jardines y superficies viales de uso público. Y especificó que en ningún caso podrían construirse edificios ni viviendas, salvo una expresa modificación.
Díaz Alperi se refirió, por otro lado, al apoyo del grupo municipal socialista, en la oposición, a su proyecto de construir un palacio de congresos en el barrio de La Sangueta, una iniciativa que no respalda el grupo de ediles del gobierno local afín a Ripoll. Para el alcalde, el respaldo de los socialistas, que ayer contó con el beneplácito del secretario general del PSPV, Joan Ignasi Pla, es un "acto de responsabilidad política".
"Todo es mentira"
"Se están diciendo muchas barbaridades; todo es mentira". Así se expresó ayer el alcalde de Alicante, el popular Luis Díaz Alperi, tras ser preguntado por la presión de un grupo de concejales díscolos de su gobierno para modificar el modelo de contratación municipal. Estos ediles no ven transparente el sistema de contratación empleado por algunos ediles de la confianza del alcalde, y le han reclamado a éste, por carta, una revisión del modelo en aras de una mayor trasparencia.
La semana pasada, Luis Díaz Alperi se comprometió a estudiar la petición de sus ediles, en el sentido de fijar un criterio "común" para los pliegos de todas las concejalías para, posteriormente, adaptarlos a las particularidades de cada departamento. E incluso encargó a la edil de Hacienda, Rosana Cremadas (una de las firmantes de la carta), que elaborara una propuesta para unificar los criterios. Pero ayer el alcalde restó éxito a ese trabajo. "Es prácticamente imposible" que salga adelante, advirtió.
Otro de los firmantes de la carta, el portavoz del gobierno municipal, Pedro Romero, aseguró: "No estoy en condiciones de rebatir al alcalde. Nosotros tenemos que presentar la propuesta y ya la hemos encargado a los técnicos".
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