Vamos por buen camino

El problema del doble ha sido en los últimos años uno de los más acuciantes del equipo español de la Copa Davis. Pero ahora, por fin, parece que vamos por muy buen camino para poder resolverlo. No se trata ya sólo de la incuestionable aportación de Rafael Nadal y Tommy Robredo, sino también de la ilusión que se está generando entre los jugadores españoles para formar un dúo capaz de entrar algún día en el torneo. Es evidente que con la victoria de ayer ellos dos se consolidan en el equipo y aportan una matrícula de honor a su buena imagen y credibilidad. Sin embargo, el G-3 no puede casarse con nadie y debe buscar siempre la opción más conveniente para resolver cada situación. Ya ahora hay otra pareja con la que hay que contar, Fernando Verdasco-Feliciano López, y la próxima semana Nadal jugará con Verdasco en Palermo porque Robredo no viaja a Italia.

La cuestión, sin embargo, es que el doble vuelve a darnos puntos. Robredo y Nadal se merecían una victoria así porque desde que comenzaron a jugar juntos decidieron sacrificar cosas y pusieron mucha voluntad para conseguir consolidarse. Lo habían logrado ya en el circuito profesional, tal como demuestran sus resultados: campeones en Chenai y semifinalistas en el Open de Estados Unidos, Dubai y Sopot. Son los 15º del mundo. Y eso no se logra por casualidad, sino porque son dos grandes jugadores individuales que han logrado una comunión poco común en el circuito. Precisamente, ese concepto fue fundamental en su victoria sobre Arnaud Clement y Michael Llodra. A su gran tenis y un nivel similar al de sus rivales agregaron que se sienten más unidos. Los franceses parecían distantes. Les faltó esa labor de equipo. Y si llevaron el partido al quinto set fue básicamente por su calidad.

La jornada ofreció otro aspecto importante. Francia se arriesgó al alinear a Fabrice Santoro en los individuales y lo pagó porque el esfuerzo que realizó ante Juan Carlos Ferrero le costó ser baja en el doble. Fue una brecha por la que entramos nosotros porque Santoro-Llodra es un dúo más consolidado que el Llodra-Clement. Ferrero volvió a mostrar su recuperación. Vuelve a estar en un gran momento de confianza, que hoy puede ser crucial frente a Paul-Henri Mathieu.

Josep Perlas es miembro del G-3.