La inversión extranjera hacia España cayó el 52% hasta junio

La inversión extranjera hacia España alcanzó en el primer semestre del año 2.831 millones de euros, lo que supuso un descenso del 51,7% en relación a igual periodo de 2003. Sin embargo, la inversión española en el exterior aumentó hasta junio el 34,4% con 5.970 millones, según los datos que facilitó ayer el secretario general de Comercio Exterior, Alfredo Bonet.

Esta desaceleración en la entrada de capitales hacia los sectores productivos de la economía ha sido generalizada en todo el mundo. Con datos de cierre de 2003, en España la inversión extranjera había caído un 40% y, "sin embargo, nuestra economía pasó de la octava a la sexta posición dentro de los países que más capitales foráneos reciben", explicó Alfredo Bonet. Buena muestra de la escasa actividad inversora en el mundo es que en Estados Unidos entraron el pasado año un 53% menos de capitales y en Alemania la reducción fue del 60%. En la clasificación de exportación de capitales, España se situó en 2003 como el octavo país del mundo que más invierte fuera.

El secretario general de Comercio Exterior señaló que esta brusca caída en la entrada de capitales hacia España no se explica por los procesos de deslocalización de la producción hacia otras economías de costes productivos más bajos. "Muchas operaciones de este primer semestre responden a desinversiones de extranjeros, cuyas plantas productivas las han comprado empresarios españoles". Y añadió: "Hay que desmitificar la deslocalización como algo negativo, ya que no es necesariamente malo ni supone recorte de empleos", dijo.

A la presentación asistió Victoria Aranda, asesora de la Conferencia de Naciones Unidas sobre Desarrollo y Comercio (UNCTAD), que presentó el informe del organismo sobre las inversiones directas en el mundo. Éstas llegaron el pasado año a su nivel más bajo desde 1998, con un importe de 560.000 millones de dólares (457.180 millones de euros). En 2003, Asia había captado el doble de inversiones que Latinoamérica. Aranda destacó también la caída de inversiones hacia los países de la Europa del Este durante el pasado año.