La inflación española supera en un punto la de la zona euro
La inflación de la zona euro creció en agosto dos décimas respecto al mes anterior. La evolución anual se mantiene, al igual que en julio, en el 2,3%. Este porcentaje deja también invariable el diferencial de inflación con España, que asciende a un punto. El índice de precios al consumo (IPC) armonizado español, el que se utiliza para comparar con el resto de Europa, alcanzó el 3,3% en agosto. Esa brecha, uno de los principales obstáculos para la competitividad de los productos españoles, se sitúa en el nivel a partir del cual los expertos consideran que se puede producir pérdida de mercado. La diferencia con toda la Unión Europea es más acentuada, pues su inflación se sitúa en el 2,1%.
Pese a todo, España no ocupa esta vez el primer puesto en inflación, sino que es superada por Luxemburgo, con un IPC del 3,6%. Tras España se sitúa Grecia, cuyos precios crecen el 2,8%. A continuación, Francia e Irlanda (2,5%) e Italia y Portugal (2,4%). Los países con los precios más controlados fueron Finlandia (0,3%), Holanda (1,2%) y Bélgica (2%).
El aumento de los precios y la posibilidad de que se traslade a los salarios preocupa a la patronal española CEOE. Su último informe de coyuntura resalta que, dada la baja tasa de ahorro familiar, el encarecimiento del petróleo puede propiciar "presiones al alza de los salarios para mantener el nivel de consumo".
