Escuchen a los vecinos

El señor Ruiz-Gallardón ha dado muestras de que estamos peor que en tiempos de la dictadura. El pasado mes de agosto inauguró en el barrio de Santa Eugenia un cibercafé para jóvenes dentro del más absoluto secretismo para los vecinos, ya que ni en su oficina de protocolo ni en la junta municipal quisieron informarnos de la fecha de inauguración.

Don Juan de Arespacochaga y Felipe, alcalde franquista, me escuchó amablemente cuantas sugerencias y quejas le formulé con motivo de su visita al barrio cuando inauguró el polideportivo Cerro de Almodóvar.

El actual alcalde solamente informó de su visita a sus compañeros de partido en Vallecas Villa; fueron los vocales vecinos de la Junta Municipal del PP junto a su séquito oficial los únicos que acudieron a la inauguración. Una señora de los tres vecinos que casualmente pasaban cuando llegó le dijo amablemente que no le parecía éticamente correcto que sólo se arreglaran los jardines alrededor del cibercafé y que en la acera de enfrente había que bajar la cabeza para no rozar las ramas de los árboles, por lo que le invitó a cruzar la calle.

Nuestro señor regidor, que venía de las Olimpiadas de Atenas, pasó olímpicamente de la vecina, ya que su meta no es escuchar a los vecinos, sino salir en los medios de comunicación, que hasta en agosto hace inauguraciones; eso sí, con la desfachatez de que sólo los jardines que salen ante la cámara son los que se conservan de acuerdo con el pliego de adjudicación a la empresa Eulen.