Los sindicatos de Alitalia rechazan los despidos y la división de la firma

Los sindicatos de Alitalia rechazaron ayer el plan de reestructuración, que incluye el recorte de 5.000 puestos de trabajo y la división de la empresa en dos, presentado por la dirección de la aerolínea para evitar la quiebra de la compañía. La acción de la empresa reanudó ayer su cotización y retrocedió un 0,13% a la espera del resultado de una negociación que permanecía bloqueada a última hora.

A la espera de una mayor concreción tanto de la empresa como de los sindicatos para cerrar el pacto que le permita a la empresa salir adelante, las acciones de la línea aérea de bandera italiana reanudaron ayer su cotización para cerrar casi sin variación, retrocediendo un 0,13%. Ayer, los máximos responsables de las principales centrales sindicales italianas mostraban su disconformidad con la propuesta de ajuste presentada el lunes por la empresa, que incluye el recorte de 5.000 de los 22.000 puestos de empleo de la empresa y la división de la compañía en dos sociedades, Alitalia Fly, para las actividades de transporte aéreo, y Alitalia Service, para los servicios.

El secretario de la central de izquierda CGIL, Guglielmo Epifani, señaló que el plan "no ofrecía las suficientes garantías" que, a su juicio, sólo puede dar el Gobierno, ya que el Estado es el accionista mayoritario de la aerolínea, con el 62%. Epifani precisó, no obstante, que seguirán en la mesa de negociaciones para tratar de exponer sus posiciones y buscar un compromiso más claro con los más de 22.000 trabajadores con los que cuenta actualmente la empresa.

En la misma línea se pronunciaron los dirigentes de los centristas CISL, Savino Pezzotta, y UIL, Luigi Angeletti, para los que el plan no es "suficientemente creíble para impulsar la compañía" y el Ejecutivo no puede "mirar para otro lado" porque representa al máximo accionista.

Temor palpable

Mientras tanto, en los aeropuertos de Roma y Milán se palpaba ayer entre los empleados la inquietud por el futuro de la aerolínea, que los sindicatos minoritarios más radicales tratan de aprovechar para impulsar medidas de fuerza, como la ocupación de las pistas, mientras algún trabajador supuestamente afectado por el recorte se ha declarado en huelga de hambre.

El ajuste planteado por el consejo de administración, que preside Giancarlo Cimoli, establece el despido de 450 pilotos, 1.120 auxiliares de vuelo y embarque y 3.430 empleados de tierra. La compañía italiana atraviesa por una grave crisis, que el pasado 30 de agosto llevó a sus responsables a advertir de que disponía únicamente de liquidez para sobrevivir un mes. Por ello, el plazo máximo para alcanzar un acuerdo con los sindicatos es el día 15.

El objetivo a corto plazo del reajuste es que se haga efectivo un préstamo de 400 millones de euros, garantizados por el Gobierno italiano y aprobados por la Unión Europea. Alitalia acumulaba hasta junio pasado pérdidas por valor de 329 millones de euros, tras cerrar 2003 con unos números rojos de 510,6 millones. La compañía arrastra además una deuda de unos 1.650 millones de euros.