Unión Europea

Estoy plenamente convencido de la necesidad de continuar la marcha de la unidad europea para convertirla en una federación. Por ello encuentro frustante la incapacidad de los políticos europeos en lograr convencer a las diversas ciudadanías de la importancia de este objetivo, que puede convertir a los europeos en ciudadanos verdaderamente libres a nivel mundial.

Pero creo también que los medios de comunicación tampoco tienen asumida esta tarea, e incluso un diario como EL PAÍS y sus colaboradores, que tan frecuentemente defienden dicha necesidad, no aciertan a transmitir a la gran mayoría de la población esta idea, y me parece que no es por falta de claridad de pensamiento, sino porque aún no hemos logrado interiorizar cómo vivir (no sólo pensar) la Unión Europea. Vivir significa no sólo comprender, sino también sentir y transmitir incluso incoscientemente esta idea en todos nuestros actos, en este caso informaciones.

Esta carta me ha surgido al mirar los resultados de las Olimpiadas recientes y oír en un bar un comentario sobre el dominio de EE UU con cierto desprecio por los logros europeos.

He pensado que si al confeccionar el medallero los responsables del mismo hubiesen vivido la idea europea de forma instintiva no habría faltado una línea con el concepto UE, y el total de medallas de los 25 países de la Unión, que son 87 - 101- 104 y un total de 292, equivalente al 31,5 % del total de medallas y casi la suma de los cuatro países primeros de la clasificación.

La olimpiadas de Atenas ya han pasado, pero las ocasiones no faltarán, tanto en los deportes como en cualquier otra actividad, para crear ciudadanos europeos...