Auna responde a Telefónica con inversiones de 4.000 millones

Auna quiere plantarle cara a Telefónica en todos los terrenos, tanto en el de negocio como en el regulatorio. Dos días después de que Telefónica anunciara un plan cuatrienal de 3.000 millones de euros para ampliar su red de banda ancha, el segundo operador de telecomunicaciones adelantó que destinará 4.000 millones entre 2005 y 2008, de los que 3.000 irán a parar a nuevas redes de banda ancha (tanto en fijo como en móvil) y otros 1.000 a la mejora de su actual infraestructura.

El consejero delegado de Auna, Joan David Grimá, considera que este nuevo plan, que se suma a los 9.250 millones que ya ha invertido el grupo desde su creación, servirá para fortalecer el proyecto para su prevista salida a Bolsa en 2005. Un estreno bursátil que "depende finalmente de la decisión de sus accionistas", según dijo Grimá, que no quiso comentar las noticias sobre posibles movimientos accionariales ante las ofertas recibidas por la división móvil Amena.

En el plano comercial, Auna también tiene un nuevo plan para hacer frente a su rival. Lanzará la primera oferta de servicios integrados para empresas con tarifa plana que incluirá todas las llamadas de fijo y de móvil dentro de la empresa y las comunicaciones fijas provinciales, acceso a Internet y el envío de mensajes cortos. La oferta va dirigida en principio sólo a aquellos clientes empresariales que disponen de acceso directo con Auna, alrededor de 600.000, pero pronto se extenderá a los clientes residenciales suscritos al cable.

El grupo quiere aprovecharse de la ventaja regulatoria que prohíbe a Telefónica comercializar paquetes de servicios integrados (fijo, móvil o Internet) de sus diferentes filiales. Grimá, que participó en los cursos de verano de la Universidad Menéndez Pelayo en Santander, argumentó que esta discriminación positiva (sólo Telefónica tiene su actividad comercial y sus tarifas reguladas) debe continuar al menos dos años, hasta que se asegure la competencia.

Una opinión muy contraria a la que tiene el director general de Regulación de Telefónica, Luis Lada, que en el mismo foro indicó que "el hecho de que se impongan restricciones a unos sí y a otros no, tiene poco que ver con la defensa de los intereses de los usuarios".