Owen debutó sin ruido
Los dos focos de atención antes del encuentro, el inglés Michael Owen -que debutaba en el Bernabéu- y el mexicano Hugo Sánchez -que regresaba al que fue su estadio durante muchos años- quedaron diluidos por la derrota del equipo blanco y por el mal sabor de boca que dejó su juego. El inglés le echó ganas. En los 45 minutos que jugó -la federación de su país pactó que, al igual que Beckham, sólo actuase una mitad por los cercanos compromisos de su selección- se mostró muy activo. Pero poco efectivo, aunque se sacó un centro muy similar al que le valió el pasado domingo en Mallorca un gol a Ronaldo.
Hugo Sánchez se tomó muy en serio el reencuentro. Tanto, que hizo un solo cambio en todo el encuentro y a falta de dos minutos para el final. Eso sí, antes de comenzar el choque saludó al técnico blanco, José Antonio Camacho, con mucha efusividad. El público le recibió con cierta frialdad y no le ovacionó de una manera especial. El técnico calificó de manera grandilocuente la victoria de su equipo: "Es un triunfo histórico para México y para mí". Para Hugo, la clave fue que sus jugadores hicieron en el campo, "exáctamente" lo "ordenado" por él.
Los jugadores blancos se marcharon del estadio sin querer comentar nada del partido.
