Dos socialistas se disputan la jefatura del nuevo Gobierno de Hungría

El Partido Socialista Húngaro (MSZP) convocó ayer un congreso extraordinario para la próxima semana con el fin de designar al nuevo primer ministro que sustituirá al dimisionario Péter Medgyessy. La dirección de la formación tiene ya una propuesta definida, pero el nombramiento depende de la votación del congreso, según explicó la presidenta de su grupo parlamentario, Ildiko Lendvai.

Aunque no haya sido anunciado ningún nombre, Péter Kiss se perfila claramente como favorito del presidium socialista para suceder a Medgyessy. El actual jefe del Gabinete del primer ministro, de 45 años, es un reformista ubicado en el ala izquierda de la formación -heredera del antiguo partido comunista- y ha tenido la cartera de Trabajo en varias ocasiones desde 1994. Sin embargo, una fuente gubernamental confirmó a Reuters que el ex ministro de Deportes, Ferenc Gyurcsany, ha decidido desafiar la elección del aparato de su partido y postularse como primer ministro, lo que obligará a que se vote en el congreso para designar al candidato.

La Constitución húngara establece como condición para el cambio de primer ministro que el nuevo responsable sea elegido por una mayoría cualificada de la mitad más uno de los diputados parlamentarios. Una vez que la renuncia de Medgyessy es oficial, el presidente de la República, Ferenc Madl, debe solicitar al Partido Socialista, mayoritario en la cámara, que designe un nuevo candidato. Si éste no es aprobado por el Parlamento en un plazo de 40 días, el presidente puede convocar elecciones.

La dimisión de Medgyessy ha sido provocada por su enfrentamiento con los liberales del partido de los Demócratas Libres (SZDSZ), socio minoritario de la coalición gubernamental, a raíz de su reforma del Gabinete ministerial.