Los hoteleros tachan de inoportunas las críticas de Tura al turismo etílico

Lloret de Mar en el punto de mira. Las declaraciones de la consejera de Interior, Montserrat Tura, que denunció que parte del sector turístico de Lloret fomenta el "turismo de borrachera", han caído como un jarro de agua fría. Los hoteleros consideran desafortunadas e inoportunas las críticas, en un momento especialmente débil del turismo catalán. Las agencias de viajes creen que así se benefician otros destinos.

El vicepresidente de la Asociación Catalana de Agencias de Viajes (ACAV), Pere Aliguer, aseguró que Tura ha perjudicado con sus declaraciones a Lloret en favor de otros destinos de fuera de Cataluña. Para Aliguer, localidades como Torremolinos, Salou, Benidorm o Lloret tienen una oferta turística semejante, especialmente dirigida a los jóvenes y al ocio nocturno.

El presidente de la Confederación de Empresarios de Hostelería y Restauración de Cataluña, Joan Molas, afirmó ayer que no es momento de hacer estas afirmaciones porque crean "angustia". Para Molas, "la situación actual es difícil, con unos competidores fortísimos"; "y encima echamos leña al fuego", dijo. La consejera de Interior defendió la necesidad de "acabar con los circuitos de coma etílico" tras los incidentes ocurridos hace una semana en Lloret, que se saldaron con una quincena de detenidos.

El Ayuntamiento de Lloret de Mar se solidarizó ayer con los hoteleros y defendió una oferta turística de calidad junto con el sector privado y la Generalitat. El presidente del Gremio de Hoteleros de Lloret, Enric Dotras, dijo no comprender por qué se culpabiliza a un municipio determinado "cuando hechos aislados como los de Lloret pasan cada día en otras zonas de Cataluña".

17 pensiones cerradas

En el último año se han cerrado en Lloret de Mar 17 pensiones que no cumplían la normativa de calidad y se han denegado 10 solicitudes para la apertura de bares musicales y discotecas. Entre el 65% y el 70% del parque hotelero de Lloret se ha reconvertido con una inversión de unos 7.500 millones de euros. El 25% de los establecimientos han aumentado de categoría. En dos años, ha pasado de tener 4 a 20 hoteles de cuatro estrellas. El sector hotelero esgrime estas cifras para justificar el esfuerzo realizado para cambiar el modelo turístico y renovar la oferta. "Pese a que en una pequeña parte tiene razón, la consejera provoca que haya titulares que embrutecen la imagen del destino turístico", explicó Doménec Biosca, presidente de la Asociación de Expertos en Turismo.

El presidente de la Federación de Hostelería de las comarcas de Girona, Antonio Escudero, considera que estas afirmaciones contribuyen a "demonizar" el sector. "Últimamente se está culpabilizando a un sector que ha aportado mucho a la economía, cuando deberíamos apoyarnos a las verdes y a las maduras", argumentó Escudero.