El PSOE exige a Gallardón mayor control sobre las armas de imitación
El grupo municipal socialista pidió ayer al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, que el Consistorio incremente los controles a la hora de expedir los permisos de armas de cuarta categoría, los que permiten llevar pistolas de imitación, como por ejemplo las de fogueo y de aire o gas comprimido. Estas armas son similares a la que portaba el ex legionario que el pasado viernes entró en el hospital de la Princesa, esgrimiendo una pistola detonadora en los pasillos del centro, provocando escenas de pánico entre los pacientes y el personal sanitario.
El portavoz adjunto del grupo municipal socialista, Óscar Iglesias, afirmó ayer que, ante el riesgo de que este tipo de armas puedan ser utilizadas para cometer actos delictivos, "es necesario, por parte del Ayuntamiento de Madrid, endurecer los controles que establece la ley". Según Iglesias, se deberían incluir más requisitos en las solicitudes para poder portar este tipo de armas.
El grupo municipal socialista propone que las tarjetas de armas de cuarta categoría sean expedidas cumpliendo favorablemente cinco requisitos "mínimos", entre ellos: la presentación de un certificado de antecedentes penales en vigor, un informe sobre las aptitudes psicofísicas del solicitante y un informe de conducta favorable emitido por la Policía Municipal. Se pretende así evitar sucesos como el del hospital de la Princesa, cuyo protagonista tiene varios antecedentes judiciales.
Reglamento de Armas
Según el Reglamento de Armas, aprobado por el Real Decreto 137/1993, se clasifican como armas de cuarta categoría a "carabinas y pistolas de tiro semiautomático y de repetición y revólveres de doble acción, detonadas por aire u otro gas comprimido". También incluye carabinas o pistolas "de ánima lisa o rayada, y de un solo tiro, y revólveres de acción simple, accionadas por aire u otro gas".
El actual Reglamento, recordó Iglesias, sólo exige que el arma esté documentada singularmente a través de la tarjeta que concede el municipio, y que se obtiene con el DNI y la factura detallada de la compra. Mediante este procedimiento, el Ayuntamiento otorgó un total de 2.203 tarjetas de armas de cuarta categoría entre 1999 y 2003, según el grupo municipal socialista.
Óscar Iglesias argumentó que la exigencia de un mayor control en la expedición de las tarjetas de armas de imitación se debe al riesgo que suponen para la seguridad y el interés general de los ciudadanos. En este sentido, y "ante el estrepitoso fracaso de la política de seguridad del PP, consideramos que garantizar la seguridad es una obligación inexcusable de los poderes públicos", aseguró Iglesias. El concejal sostiene que "frente al que quiera seguridad que se la pague, que preconiza el PP; hay que garantizar la seguridad y la libertad para que los ciudadanos puedan ejercer sus derechos y libertades".
