Asfalto para cambiar la cara a 156 calles de la capital
Un total de 156 calles de Madrid van a cambiar de cara este verano. La Operación Madrid Pavimenta Madrid, conocida anteriormente como Operación Asfalto, está aprovechando muchas noches desde el pasado 22 de julio hasta el 31 de agosto para proceder al asfaltado de estas vías de los 21 distritos de la capital.
Este año, con un presupuesto de seis millones de euros, se ha atendido las peticiones de las juntas municipales de distrito, según explica la directora general de vías públicas y equipamientos urbanos, Fernanda Serrano. "Vamos a comenzar una renovación integral de las calles de Madrid, puesto que en los últimos 10 años hemos invertido poco", afirma. En 2003 sólo se asfaltaron dentro de la misma operación 26 calles, con un presupuesto de 1,5 millones de euros.
Dentro de las calles incluidas en Madrid Asfalta Madrid están vías como el paseo de la Castellana (carriles lateral, central y bus, entre la plaza de Lima y la de Cuzco), el pasaje de Santo Ángel (Hortaleza), Burriana (Barajas), General Orgaz (entre la calle de Orense y la calle del General Perón), la avenida de Palomeras (entre la avenida de Buenos Aires y la calle de Pablo Neruda), la Ronda Sur (entre la calle de Joaquín Garrigues y la avenida de Entrevías), el paseo del Marqués de Zafra y el paseo de La Habana. Hasta el momento, ya se han asfaltado alrededor de 35 calles.
Actuación rápida
La operación de asfaltado requiere de un paso previo, el fresado, mediante el que se retira el asfalto anterior para impedir que el nivel de la calzada se equipare al de las aceras. Posteriormente se sanea la vía sobre la que se va actuar, y se nivelan todos los registros de los distintos servicios municipales (arquetas). Por último se recubre con asfalto. Los vehículos pueden circular por la vía 45 minutos después de que se ponga el asfalto.
El pasado lunes se actuó en el paseo de la Alameda de Osuna. Las obras comenzaron a las 22.00 y concluyeron hacia las 5.00. Para ello se cortó el tráfico en uno de los sentidos y se desvió el paso de vehículos. "Procuramos en la medida de lo posible no desviar las rutas de los autobuses para no desorientar a los usuarios", explicaba un responsable técnico de la actuación. Ésta es la dinámica que se suele emplear en todas las vías.
Los asfaltados también han levantado polémica. La portavoz municipal de IU, Inés Sabanés, alertaba esta semana de que algunas calles adoquinadas, como Redondilla y Mancebos, en los alrededores de la plaza de la Paja, se van a asfaltar. Sabanés argumentó que el adoquinado debería permanecer tanto para evitar excesos de velocidad como para respetar el "escenario histórico que las rodea". Estas críticas fueron rebatidas por la propia responsable de Vías Públicas, quien aseguró que volver a adoquinar "no favorece la reducción del ruido en las calles", motivo de queja de muchos vecinos.
