La muerte de otros tres ancianos eleva a 12 el número de víctimas por el calor en Canarias

La Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias confirmó ayer que la muerte de otras tres personas en las últimas horas también se ha debido a la ola de calor, la más duradera de los últimos 14 años, que desde el pasado lunes ha traído calima africana al archipiélago y al sur de la Península. Las autoridades estudian la muerte de otras cinco personas en los últimos días, por si también fueran imputables a golpes de calor, como efecto de temperaturas que han superado los 40º a lo largo de toda la semana. Con el reconocimiento de estas tres nuevas muertes, ya son 12 las personas fallecidas directamente por esta causa, aunque las autoridades insisten en que el calor sólo ha sido un agravante de otras patologías que ya padecían las víctimas.

Los casos reconocidos ayer corresponden a una mujer de 70 años y a un anciano de 96 ingresados en el Hospital Insular de Gran Canaria, mientras el tercero corresponde a una mujer de 80 años, convaleciente en el Hospital de La Candelaria (Tenerife). La red de hospitales públicos de Canarias ha atendido a 14 personas en los dos últimos días, de las que nueve permanecen ingresadas. Sólo en esta semana, se han atendido 127 casos, fundamentalmente de personas mayores de 55 años. Sanidad no ha comunicado incidencias relativas a niños o enfermos cardiorrespiratorios. La incidencia ha sido mayor en la provincia de Las Palmas, dado que en las islas de Lanzarote, Fuerteventura y sur de Gran Canaria es donde las temperaturas han permanecido muy altas de forma continuada, seguidas del sur de Tenerife.

El Gobierno de Canarias ha lanzado una campaña de alertas a través de los medios de comunicación para concienciar a la población y visitantes. Las personas de mayor riesgo son los niños, ancianos y personas con enfermedades broncorrespiratorias. Entre las recomendaciones básicas se incluyen ventilar las habitaciones; acudir a lugares con aire acondicionado (centros comerciales, cines, oficinas); reducir la actividad física, incluso en locales cerrados; usar ropa ligera y holgada, de colores claros, y llevar sombrero, gorra y gafas de sol. También se recomienda evitar permanencias prolongadas en el exterior de los hogares, mantener las ventanas cerradas, no realizar esfuerzos al aire libre, tomar agua con frecuencia y evitar las bebidas con cafeína, alcohólicas, o muy azucaradas, y no fumar. En cuanto a la dieta, se sugiere comer frutas y verduras.