Carmina Ordóñez, hallada muerta en su domicilio de Madrid
Famosa durante toda su vida por ser hija, mujer y madre de grandes figuras del toreo, Carmina Ordóñez, que falleció ayer en su casa de Madrid, a los 49 años, brilló con luz propia toda su vida en el mundo del "corazón". Fue encontrada muerta en la bañera de su domicilio madrileño con un golpe en la cabeza. La autopsia para averiguar la causa de su muerte se realizará esta mañana.
Carmina, que nació en Sevilla el 2 de mayo de 1955, lo tuvo todo, pero no logró nunca la estabilidad sentimental, tras tres matrimonios fracasados (el torero Francisco Rivera, Paquirri; el cantante Julián Contreras, y el bailarín Ernesto Neyra). También estuvo ligada sentimentalmente con Antonio Arribas. Tuvo tres hijos, Francisco y Cayetano, fruto de su unión con el torero Francisco Rivera, y Julián, nacido de su matrimonio con el cantante Julián Contreras. En los últimos años de su vida reconoció tener problemas y abusar de las pastillas para poder dormir e ingresó por voluntad propia en varias clínicas de desintoxicación.
Desde su nacimiento en Sevilla, mantuvo estrechas relaciones con las primeras figuras del toreo de ese tiempo, al ser hija del matador Antonio Ordóñez y sobrina de Luis Miguel Dominguín, hermano de su madre. Años más tarde, su hijo mayor, Fran Rivera, se casó con Eugenia Martínez de Irujo, y se convirtió en consuegra de la duquesa de Alba. Compartió su infancia entre Sevilla y la localidad malagueña de Ronda, donde mantuvo contacto con personajes internacionales interesados en el arte taurino, como el escritor norteamericano Ernest Hemingway.
Se casó muy joven con el torero Francisco Rivera, Paquirri, al que conoció a los quince años y con el que tuvo dos hijos, Fran, que nació el 4 de enero de 1974, y Cayetano, el 13 de enero de 1977. Este primer matrimonio obtuvo la nulidad eclesiástica el 27 de enero de 1983 por el Tribunal de la Rota.El 14 de enero de 1986 nació su tercer hijo, Julián, fruto de su matrimonio con Julián Contreras.
Trabajó en el mundo de la moda como modelo de pasarela, en el mundo de la fotografía y también fue relaciones públicas de una agencia de viajes dedicada a Marruecos, país al que se trasladó en diciembre de 1990 para instalar su residencia en Marraquech, junto a su marido Julián Contreras y su hijo menor. A principios de 1996 Carmen Ordóñez volvió a residir en su ciudad natal, Sevilla.
En los últimos tiempos su salud y aspecto físico sufrió un gran deterioro que la llevó a ingresar en el 2002 en la madrileña clínica de San Miguel, de las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón, "en un intento por superar su adicción a los somníferos, de los que -según sus palabras- estuvo dependiendo durante todos estos pasados años". A comienzos de 2004 volvió a ingresar en una clínica de Barcelona "para iniciar un nuevo tratamiento contra su adicción a los somníferos". Desde hacía un año colaboraba en el programa de Telecinco A tu lado.-
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