El sistema antiincendios de la subestación falló, según Unión Fenosa
El "grave incidente" se complicó al arder 40.000 litros de aceite refrigerante
El sistema contraincendios de la subestación eléctrica de la calle de Alameda (Centro) no funcionó, según admitieron ayer fuentes de la empresa Unión Fenosa. El fuego, originado por el recalentamiento de uno de los transformadores del centro, se complicó al arder 40.000 litros de aceite mineral, que se usa como refrigerante. La subestación, con 40 años de antigüedad, estaba siendo modernizada.
Unión Fenosa, según explicó ayer su consejero delegado, Honorato López Isla, sabe que ardió un transformador de los cuatro instalados en la subestación (dos antiguos y dos nuevos que todavía no habían entrado completamente en servicio), pero no por qué ardió ni por qué no funcionaron los sistemas contraincendios con que cuentan los aparatos: lluvia de espuma y muro cortafuegos. La compañía, eso sí, descarta por completo cualquier causa del incidente que no sea técnica.
"Pensamos que ardió uno de los transformadores nuevos" aseguró López Isla. Los transformadores, instalados en un proceso de más de un año, estaban siendo preparados desde hace un mes para sustituir a los antiguos y "estaban siendo energizados [recibiendo tensión eléctrica]", aunque no prestaban todavía servicio en la distribución. Según Unión Fenosa, la subestación que ardió estaba "al 70% o 75%" de su nivel de funcionamiento, muy por debajo de su capacidad, que en momentos punta puede llegar "al 115%".
El incidente, calificado de "grave" por el directivo de Unión Fenosa (compañía que se reparte casi al 50% el mercado madrileño con Iberdrola) fue muy aparatoso ya que, junto con el transformador, ardieron 40.000 litros de aceite mineral de alta densidad, muy puro, equivalentes a dos camiones cisterna. Este tipo de aceite se emplea como refrigerante de los transformadores.
Otras fuentes destacan que la combustión de este tipo de aceite no suele ir acompañada de llamaradas como las vistas ayer, por lo que sugieren la existencia de un combustible adicional.
Según la compañía eléctrica, el incidente fue registrado por su centro de control de forma inmediata. En el momento del incendio, en la subestación sólo permanecía un vigilante. "Era la hora de comer (13.40)" explicó López Isla "y no estaba ninguno de los operarios que trabajan en la subestación". En las instalaciones de Mediodía de Unión Fenosa trabajaban 16 personas "muy cualificadas", según la empresa, encargadas de montar los nuevos aparatos y de supervisar su funcionamiento.
40 subestaciones en Madrid
Unión Fenosa posee en la capital otras 40 instalaciones similares, "muchas de ellas subterráneas, encapsuladas y muy protegidas", según fuentes de la compañía. La cuarta parte de ellas están siendo modernizadas para atender la creciente demanda de energía, dentro de un programa de inversiones que alcanza los 400 millones de euros en los próximos cinco años.
El incendio registrado ayer en Madrid recuerda al sucedido semanas atrás en Sevilla, cuando falló una subestación propiedad de Endesa, lo que sumió a la capital andaluza en el caos. Es, en palabras de Honorato López Isla "el peor incidente que puede registrarse en el sistema de distribución" y se produce en un momento en que, desde el Ministerio de Industria, se acusa a las compañías de haber invertido poco en el sistema de distribución eléctrica en España.
El Ministerio de Industria, que dirige José Montilla, estudia cómo modificar el sistema tarifario eléctrico y sanciones para incentivar la inversión en el sistema de distribución que viene fallando desde hace años en momentos de consumo eléctrico intenso, tanto en invierno como en verano.
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