El Egipcio ya fue investigado en 2002 como jefe de una célula islamista

La policía investigó durante el año 2002 la "estructura de una posible célula de Al Qaeda en España dirigida por Rabi Osman El Sayed, Mohamed El Egipcio". Se trata de uno de los supuestos ideólogos de los atentados del 11 de marzo, que fue detenido en junio en Milán tras haberse jactado telefónicamente de que la masacre fue idea suya. El Egipcio, un ex militar experto en demoliciones, salió de España en febrero de 2003, pasó por Francia, residió en Alemania y, finalmente, se refugió en Italia para la preparación de nuevos atentados.

Según uno de los informes entregados ayer a la comisión de investigación del 11-M, la investigación sobre El Egipcio, incluidas en las diligencias previas 53 / 02, reveló que tenía contactos "con otros países europeos". Pero sobre todo, se dice que los investigadores de la Comisaría General de Información de la Policía estaban "procediendo a la identificación de todos aquellos que aparecen relacionados con dicho individuo, muchos de los cuales presentan contactos con células de grupos marroquíes (Salafia Jihadia)".

El informe contiene una relación de investigaciones sobre terrorismo islamista llevadas a cabo en España, que subrayan la insistente conexión marroquí y el ascendente sobre las células de dicho país de Amer El Azizi, Othman El Andalusí; apuntan el posible papel de coordinador para Europa de la organización terrorista Ansar El Islam de un ciudadano español de origen iraquí o la penetración en España de grupos de la corriente salafista a través de Melilla.

Así, se detalla que un grupo llamado Takfir Wal Hijra se ha asentado en la mezquita melillense de Assalam y se expone la sospecha de que está relacionado con los atentados de Casablanca y presenta "conexiones con miembros salafistas de organizaciones terroristas marroquíes y de éstas con Al Qaeda". El Egipcio militaba en la corriente Takfir Wal Hijra.

Plantilla antiterrorista

El Gobierno también envió ayer otro informe desclasificado sobre la evolución de los medios personales y materiales de las unidades encargadas de la lucha contra el terrorismo islámico desde el 11-S. El documento muestra que en 2001 la Comisaría General de Información tenía 61 agentes en el servicio de asuntos árabes e islámicos y que entre el 11-S y los atentados de Casablanca (mayo de 2003) la plantilla aumentó en cinco personas. A fecha del 11 de marzo la plantilla era de 74 agentes.

La Guardia Civil señala que la jefatura del Servicio de Información tiene a sus órdenes a día de hoy a 2.100 agentes, tres menos que en 2000. No obstante, el documento del instituto armado refleja que "la totalidad del personal interviene en la lucha contra el terrorismo islámico, además de atender al resto de amenazas". A renglón seguido, afirma que su grupo de información exterior, especializado en el asunto, estaba compuesto en 2001 por 44 funcionarios, pero que en 2004 la cifra ha crecido hasta los 62.