¿Quién ha mejorado más?

Dos selecciones que viajan en una misma dirección se cruzan hoy en el estadio Alvalade. Portugal y Holanda son equipos en franca progresión, disponen de múltiples recursos, cuentan con las hinchadas más numerosas y vitales del torneo y se presentan como la mejor alternativa a la luminosa República Checa. El fútbol de ambas invita al optimismo porque tienen excelentes jugadores de ataque, especialmente en las bandas, y su sistema de contención está presidido por dos centrales en buena forma, el veterano Stam y el joven Ricardo Carvalho, por no hablar de los porteros, protagonistas los dos en las últimas ruedas de penaltis.

Stam ya ha dicho que se retira de la selección holandesa en cuanto acabe el torneo. Lo mismo piensa Frank de Boer, Overmars y hasta puede que Cocu. Y una circunstancia parecida podría producirse en el otro equipo con Figo, Rui Costa y Couto. Para muchos futbolistas que compiten esta noche, el partido se presenta como la última oportunidad para disputar un título continental. Dos veces semifinalista, la última en 2000 ante Francia, Portugal nunca alcanzó una final mientras que Holanda sólo ha sido campeona en una ocasión (1988).

Pese a que les avala la trayectoria de los últimos campeonatos, los holandeses señalan a Portugal como favorita, porque no le suele ir muy bien en sus enfrentamientos particulares y sobre todo por su condición de anfitriona, sin reparar en que el organizador no gana el torneo desde 1968 (Italia), a excepción de Francia-84, y que la única vez que la selección oranje ganó el campeonato eliminó en semifinales a Alemania en su propia casa.

Advocaat habla de Portugal para no tener que referirse a Holanda. Antes cuestionado, el seleccionador holandés cuenta ahora con el apoyo de la federación para continuar en el cargo. Sabe, en cualquier caso, que la confianza le será nuevamente retirada si no da hoy con la mejor alineación y cambia mal durante el encuentro. Advocaat parece haber coincidido con la crítica en que Van der Meyde es el punto débil del equipo y podría sustituirle por Overmars puesto que Robben puede jugar indistintamente en la derecha o en la izquierda. La otra novedad será la presencia de Bouma en sustitución del lesionado Frank de Boer, baja para esta noche y, si se da el caso, para la final.

Los holandeses acuden especialmente animados a la cita después de haber superado el síndrome de los penaltis en el partido de cuartos de final contra Suecia. ¿Qué pensabas antes de tirar el penalti?, se le preguntó a Robben, que firmó la clasificación. "Justamente lo que hice fue no pensar". "Yo me volví loco", aclaró Heittinga. "Era tanta la presión que sentía que cuando lo transformé empecé a saltar, a celebrarlo, hasta que me di cuenta de que no me seguía nadie. Quedaban muchos por tirar".

"Es la mejor Holanda que conozco desde la que ganó en Múnich-1988", aseveró Scolari, el seleccionador portugués, que podría recuperar a Pauleta como delantero centro en sustitución de Nuno Gomes, que sale de una pequeña lesión. Portugal se siente fuerte, sobre todo psicológicamente, después del partido que le remontó a Inglaterra. Scolari insiste en que se necesita madurar el encuentro para después resolverlo. Tiene especial confianza en que los centrales podrán con Van Nistelrooy después de haber enfrentado a Owen-Rooney y Raúl-Torres, pero no descarta tomar medidas defensivas especiales frente a los extremos y corregir algunas posiciones en el medio del campo.

Respecto al partido inaugural contra Grecia, Scolari ha cambiado prácticamente toda la defensa (sólo se mantiene Andrade) y ha recurrido a Deco y Cristiano Ronaldo en lugar de Rui Costa y Simao, dos futbolistas que funcionaron muy bien en el último tramo del partido contra Inglaterra. El plan parece valerle para el partido de hoy en Alvalade.

Portugal se siente ante la gran ocasión de su vida para alcanzar una final que por tradición y futbolistas cree merecer. La selección de Figo quiere reivindicar el nombre de jugadores como Eusebio o Chalana con el inconveniente de que enfrente tendrá al equipo liderado por Van Nistelrooy, que a diario dice sentirse ante el partido más importante de su vida, dispuesto a suceder a Van Basten, rey en el torneo de 1988.

Llegados a tal punto, la pregunta es: ¿cual de las dos selecciones ha mejorado más? La semifinal tiene muy buena pinta.