"La tortura es endémica en EE UU"

Cuenta Darnell Summers que cuando vio en la prensa las imágenes de los soldados estadounidenses abusando y torturando a presos iraquíes no se sorprendió. Summers lo vio todo por primera vez en la guerra de Vietnam,cuando sólo tenía 21 años. "Nada más bajar del avión vi a un hombre arrodillado que tenía la cabeza cubierta con una capucha negra y que estaba custodiado por dos soldados armados", explica el veterano, que esta semana ha pasado por el Fórum para participar en unas actividades en torno al diálogo Hacia un mundo sin violencia.

La experiencia en Vietnam marcó tanto a Summers que años después, en 1990, cuando junto a un grupo de ex soldados vio por televisión cómo Irak invadía Kuwait decidió formar un grupo pacifista para mostrar su rechazo a ésa y a cualquier otra guerra. El grupo se llama Stop the War Brigade (Brigada para parar la guerra, literalmente) y desde entonces ha participado en multitud de protestas y actividades culturales.

Summers explica que ya era contrario a la guerra antes de alistarse al ejército. ¿Y qué lleva a un pacifista a alistarse? "Mi padre ejercía una presión muy fuerte sobre mí y yo lo único que quería era huir y alistarme".

Una vez alistado, recibió la orden de ir a Vietnam. Allí le invadió un intenso sentimiento de impotencia cuando veía día tras día la pobreza y la miseria en la que vivían sumidos los vietnamitas. Pero ocurrió algo que le hizo abrir los ojos de una vez por todas: "Uno de los sargentos de mi compañía se dedicaba a violar a una niña o a una chica día sí y día también".

Su paso por Vietnam no fue muy largo. Sólo tres meses después de llegar a ese país lo arrestaron porque estaba acusado de tentativa de homicidio en Estados Unidos. Según él mismo cuenta, antes de ir a Vietnam participó en varias organizaciones que mostraban su rechazo a la guerra. Un día hubo un incidente con un grupo de policías en el que él se vio envuelto. Un guardia murió y otros dos resultaron heridos. Summers tuvo que pasar dos años en prisión antes de que un testigo reconociera que lo había señalado como culpable sólo porque la policía le había obligado. El veterano asegura que también fue torturado en una prisión de EE UU y que el sistema tendría que hacer un cambio radical para poder evitar los abusos. "La totrtura es un mal endémico del sistema de EE UU", asegura. Su organización lucha para animar a los soldados a denunciar estas prácticas.