Los líderes kurdos amenazan con romper con Bagdad

Los líderes kurdos iraquíes han amenazado en una carta dirigida al presidente de EE UU, George W. Bush, con romper con el Ejecutivo iraquí a menos que reciban garantías de que el Gobierno interino no limitará el autogobierno kurdo.

En la misiva, los principales líderes kurdos, Masud Barzani y Yalal Talabani, aseguran que no participarán en las elecciones previstas para enero y que impedirán la entrada a representantes del Gobierno iraquí en el Kurdistán si Bagdad modifica la Constitución aprobada en marzo. La Carta Magna reconoce la autonomía kurda en tres provincias del norte de Irak. "El pueblo kurdo no va a aceptar una ciudadanía de segunda clase en Irak", rezaba la carta que los kurdos enviaron a Bush.

Talabani y Barzani pedían a la Administración de Bush que incluyera la Constitución en la nueva resolución, aprobada el martes por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Washington rechazó la demanda kurda, después de que los líderes chiíes -incluido el poderoso gran ayatolá Ali Sistani- amenazaran con "serias consecuencias" si se daba un paso semejante. En una carta, Sistani advirtió al Consejo de Seguridad de la ONU acerca del supuesto peligro de incluir la Constitución en la resolución 1.546. "Esta ley , que fue escrita por un Consejo no elegido, bajo la ocupación y bajo influencia directa de los ocupantes, limitaría al nuevo Gobierno", escribió Sistani. "Es rechazada por la mayoría de los iraquíes", apostilló.

"Todos los esfuerzos que hicimos durante el año pasado han caído en saco roto. Ahora hemos visto cómo la democracia puede ser usurpada", se lamentaba ayer un dirigente kurdo en referencia al texto de la nueva resolución. Abdel Mahdi, ministro de Finanzas iraquí, chií y miembro del Consejo Supremo para la Revolución Iraquí, aseguró el martes que los líderes chiíes estaban decididos a eliminar el derecho a veto de los kurdos en la Constitución definitiva. "No es algo en contra de los kurdos, es en contra del procedimiento", dijo Mahdi.

Un portavoz del Departamento de Estado de EE UU trató por su parte de calmar los ánimos de la comunidad kurda y aseguró que los derechos de los kurdos serían salvaguardados en Irak, sin explicar el porqué de la negativa estadounidense a incluir la Constitución iraquí en la nueva resolución de la ONU. "En la comunidad internacional trabajaremos para hacer la democracia

un éxito, para asegurar que los derechos de todos los iraquíes son respetados", declaró el portavoz estadounidense, Adam Ereli. Sin embargo, un alto oficial de Naciones Unidas, que no quiso desvelar su identidad, aseguró que EE UU rechazó la demanda kurda para tratar de no ofender a los líderes chiíes.

Leyes de la ocupación

Los líderes iraquíes y fuentes de la ONU aseguran que, de acuerdo con el derecho internacional, el nuevo Gobierno iraquí no estará obligado por ninguna ley aprobada durante la ocupación estadounidense. Un dirigente kurdo, que habló bajo el anonimato, argumentó, por su parte, que el Gobierno iraquí sólo refrendaría la nueva Constitución si de alguna manera era obligado a ello, por eso los líderes kurdos se empeñaron en que el texto legal se adhiriese a la resolución de la ONU.