Greenspan insinúa una fuerte subida de tipos en EE UU

El presidente de la Reserva Federal (banco central) de EE UU, Alan Greenspan, pareció abrir las puertas ayer a una subida de tipos en la economía estadounidense mucho más vigorosa de la esperada ya por los analistas. En una intervención vía satélite desde Washington para un seminario económico en Londres, Greenspan dibujó un escenario de estabilidad pero lanzó la advertencia de que la Fed hará "lo que sea necesario" para contener los precios. El mercado interpretó de inmediato sus palabras como un indicio de que la política monetaria se va a endurecer a un ritmo superior al hasta ahora previsto, provocando un fortalecimiento del dólar y una moderada tendencia a la baja de las bolsas y el oro.

Los analistas no se ponían de acuerdo ayer sobre las consecuencias de las palabras de Greenspan. La mayoría sacaban la conclusión de que era un aviso de que la Fed, en su reunión de final de mes, subirá los tipos en medio punto en lugar del cuartillo que pregonaban muchos expertos. Otros se decantaban por la interpretación de que, efectivamente, la Fed va a subir los tipos a final de mes, pero estimaban que esa subida será sólo de 0,25 puntos dado el mesurado tono general de la intervención del veterano patrón de la política monetaria estadounidense.

Los tipos están al 1%, el nivel más bajo desde 1958. Sin embargo, los datos de creación de empleo difundidos el viernes (248.000 empleos en mayo), aunque dejaron satisfecha a la Administración fueron recibidos con cierto desencanto por el mercado, dejando a los analistas algo confusos y al dólar al pairo porque ponían en cuestión la fortaleza de la recuperación económica y, por tanto, la vaticinada subida de tipos. Las palabras de Greenspan han creado ahora el consenso de que la subida es segura, aunque está por ver si será de 25 o de 50 puntos básicos.

El dólar se fortaleció hasta 1,2254 dólares por euro nada más difundirse su intervención, frente a 1,2306 apenas tres horas antes y 1,2321 dólares por euro el lunes en Nueva York. La Bolsa recibió a la baja los comentarios, aunque sin nerviosismo. El Dow Jones arrancó 37,89 puntos por debajo de su cierre del lunes, una caída del 0,36%. Los analistas bursátiles atribuían la tendencia bajista no sólo a las palabras de Greenspan, sino a la recogida de beneficios después de tres días de robustas subidas.

Greenspan rehusó comentar las consecuencias de la subida del petróleo con el argumento de que los estudiosos no acaban de ponerse de acuerdo sobre la influencia que las alzas y bajas del crudo acaban provocando a la política monetaria.