Chipiona "impasable"

El último fin de semana de mayo tuve la desgracia de asistir al ensayo general del regreso de la playa en el periodo estival. El atasco monumental de coches que se formó en Chipiona en la salida hacia Sevilla fue una prueba de paciencia, y una vez más, de la ineficiencia de los gestores públicos. Allí estuvimos los sufridos contribuyentes, perplejos, uno tras otro, esperamos infructuosamente que alguien pusiera orden en aquel caos. Pero para nuestra desesperación ni un solo agente de la autoridad hizo acto de presencia en los muchos puntos conflictivos del trayecto tales como la rotonda del parque, el cruce de la carretera de Rota con la avenida del Ejército, o la rotonda de la avenida de Andalucía. Con gran paciencia, aguantamos estoicamente, sin ni siquiera hacer sonar el claxon. Quizás si hubiéramos pitado habría venido algún guardia, y, de camino que nos multaba, hubiera reorganizado el tráfico.

Hoy la radio me ha recordado que Andalucía ofrece muchas horas de sol, y playas. Lo que la publicidad no cuenta es lo que ocurre después, cuando, harto de playa, el turista quiere volver, y lo que se encuentra es el desprecio más absoluto por parte de la Administración Pública. Y eso que tengo entendido que Chipiona ha pedido la declaración de "municipio turístico". ¿Puntuarán los atascos? Luego dicen que España es diferente. Y que lo digan.