Detenido por negarse a llevar a un infartado en su ambulancia

El conductor de una ambulancia de una empresa concertada del hospital de Valme de Sevilla declaró ayer en un juzgado de instrucción de la capital andaluza tras ser detenido por la Guardia Civil por un presunto delito de omisión de socorro y de desobediencia a los agentes de la autoridad. El hombre se negó a trasladar a Diego A., un hombre que sufrió un infarto cerebral el pasado 5 de mayo en El Viso del Alcor (Sevilla), alegando que "ése no era su servicio y que él lo que tenía que hacer era recoger a unos pacientes para llevarles a rehabilitación", según la Policía Local.

El enfermo, de 70 años, tuvo que esperar la llegada de otra ambulancia, que tardó unos 30 minutos, y murió cuando entraba en el ambulatorio de la localidad. Los policías locales que dieron el alto a la primera ambulancia para que socorriese al enfermo denunciaron al conductor, que estuvo 15 minutos delante del domicilio del infartado negándose a trasladarlo. Al ser recriminado por los vecinos y familiares, que inmovilizaron su vehículo, y ser requerido por la Policía Local, el hombre contestó que "sólo aceptaba órdenes de la centralita".

Traslado

Diego A. falleció cuando llegaba al centro sanitario trasladado por la ambulancia del Servicio de Emergencias de la Junta de Andalucía que había solicitado en un primer momento.

Rosa Algaba, una de las hijas del hombre fallecido, afirmó ayer que la familia se encuentra muy apenada por lo sucedido. "Ahora nos queda la duda de que mi padre pudiese estar vivo si lo hubiese trasladado la primera ambulancia", informa Europa Press. Algaba dijo que su padre estaba bien de salud e incluso hacía deporte todas las mañanas. "Por eso pensamos que, si mi padre hubiese recibido los primeros auxilios propios de una persona que sufre un infarto, quizás podría haber sobrevivido".

Por su parte, la Guardia Civil, que tomó declaración al equipo médico que atendió al fallecido, comunicó ayer que los facultativos interrogados no pudieron precisar si el tiempo de retraso en el traslado del enfermo hubiera sido suficiente para salvarle la vida.