La fiscalía francesa apoya entregar a tres compatriotas sin extradición

La fiscalía francesa requirió ayer la entrega directa a España de tres de sus compatriotas, en cumplimiento de una orden europea de arresto dictada por el juez español Baltasar Garzón. Un tribunal de Pau decidirá el 1 de junio. Francia nunca concede la extradición de sus ciudadanos. Si en esta ocasión entregará a España a los tres franceses, la decisión sentaría un precedente. Garzón les reclama para interrogarles sobre su participación en una manifestación prohibida en España.

Técnicamente no se trata de una extradición, sino de la aplicación de la nueva orden europea de arresto que, en teoría, permite a un juez obtener la detención de ciudadanos en otros países de la UE. Los tres jóvenes en cuestión, Amaia Rekarte, Yves Matxikote y Haritza Galarraga, fueron arrestados el 12 de mayo en sus domicilios de Ustaritz y de Saint Pée sur Nivelle, en el País Vasco francés, y la fiscalía les notificó la orden de arresto firmada por Garzón para interrogarles sobre su participación en una manifestación prohibida en España, convocada por un grupo considerado próximo a ETA. A las pocas horas fueron puestos en libertad, con obligación de presentarse ante el tribunal que ha de autorizar, o no, su entrega a España.

La vista se celebró ayer en Pau. Las abogadas de los reclamados, Maritxu Paulus-Basurco y Yolanda Molina, sostuvieron que se persigue a sus defendidos por un "delito de opinión" y cuestionaron una orden de entrega que no precisa la fecha, el lugar, las circunstancias ni el grado de participación de las personas en la infracción.

Frente a ellas, la representante de la fiscalía, Chantal Firminger-Michel, sostuvo que todo es legal y que los tres reclamados deben ser entregados a Garzón; discutir el contenido de la orden es algo que "debe realizarse ante la justicia española", mantuvo la representante del ministerio público en la vista.

Procesados hace dos años

Garzón ya les había procesado hace más de dos años. En aquel tiempo lanzó una orden internacional de detención contra ellos, prácticamente sin ninguna posibilidad de éxito, porque ese procedimiento habría desembocado en una extradición y Francia no extradita a sus nacionales. El magistrado ha usado ahora la orden europea de arresto, en vigor desde hace dos meses en Francia y España.

La cuestión reside en saber si un francés puede ser perseguido en España por actividades vinculadas a grupos que no están prohibidos en Francia pero sí en España, porque se les considera vinculados a ETA. Asociaciones vascofrancesas han convocado una manifestación de protesta en Bayona para finales de mes y denuncian a las autoridades de Francia que "accediendo a tales medidas, participan en la persecución contra los movimientos políticos vascos que se ha producido a lo largo de esos últimos años". Askatasuna, en concreto, acusa de "agresión directa" al nuevo ministro francés de Interior, Dominique de Villepin, y califica de "totalmente inaceptable" que "tres jóvenes militantes vascos sean encarcelados para saciar las necesidades de la cooperación franco-española".