Sanción de 168 kilos

Manuel Horta, un funcionario del Ayuntamiento de Avilés (Asturias), que trabaja como monitor de natación en una piscina municipal, ha abonado una sanción, que considera injusta, con la entrega de 41.157 monedas de 10 céntimos y 3 monedas más de un céntimo. Su idea fue hacerlo con más de 400.000 monedas de un céntimo, pero desistió porque la Fábrica de la Moneda advirtió a la sucursal bancaria a través de la cual el monitor solicitó las monedas que no podría disponer de ese volumen antes de varios meses. Horta fue condenado por un juzgado de la ciudad a pagar los daños sufridos por una máquina de la piscina municipal (4.115,75 euros), y de los que fue considerado responsable. El funcionario, que se declara inocente, recurrió la sentencia por vía contencioso-administrativa y ha pedido amparo al Tribunal Constitucional, pero el Ayuntamiento reclamó por vía ejecutiva la ejecución de la sentencia. Manuel Horta cumplió con el abono, pero entregando un volumen de monedas que pesó 168 kilos.-