Las asociaciones agrarias solicitan ayudas para paliar los efectos del encarecimiento del gasóleo y los piensos
Las materias primas para la alimentación animal y los carburantes constituyen los dos puntos negros para el sector agrario en los últimos meses ante la subida espectacular de las cotizaciones. El sector teme que el encarecimiento del petróleo afecte igualmente a los precios de los fertilizantes. Organizaciones agrarias y cooperativas coinciden en sus peticiones de medidas fiscales para paliar su efecto sobre las rentas.
En las materias primas para la alimentación animal, la situación negativa se mantiene desde el inicio de la campaña el pasado mes de julio. Según los datos elaborados por la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), desde el mes de julio de 2003 hasta mayo de 2004, la subida espectacular de los precios de los cereales se ha traducido en pérdidas por unos 400 millones de euros. Aunque el problema ha afectado al conjunto de las cabañas ganaderas, las mayores dificultades se han centrado en la ganadería intensiva por su mayor utilización de los piensos. La escasez de los cereales piensos en la UE, junto a la subida de los precios de la soja en todo el mundo, se ha traducido en un aumento medio de los precios de los piensos de 0,04 euros por kilo.
Por cabañas ganaderas, el porcino se hallaría a la cabeza con pérdidas de 200 millones de euros, situación que se ha sumado a un periodo de precios a la baja. En el vacuno de carne y de leche las pérdidas serían de 128 millones de euros, con reducción esta primavera de los precios de la leche, y de 95 millones de euros para la avicultura de puesta y de carne.
En el caso del gasóleo, la subida se ha centrado en los últimos cuatro meses coincidiendo con un periodo en que las tareas agrícolas son más reducidas. El precio ha pasado de 0,37 a 0,45 euros por litro. Sin embargo se teme su repercusión cuando se generalicen los trabajos en el campo. Frente a esta situación, en lo que afecta a los cereales pienso, el sector ganadero y los fabricantes de piensos se hallan resignados y se limitan solamente a esperar que se confirmen las buenas expectativas que hay para la nueva cosecha, cuya recolección está a punto de iniciarse.
En el combustible, el sector reclama a la Administración diferentes medidas, desde ayudas directas hasta el establecimiento de un gasóleo profesional que pide el sindicato agrario COAG. La Asociación Agraria Jóvenes Agricultores, Asaja, reclama que el Ministerio de Agricultura abra negociaciones para buscar una salida. Esta organización centra sus peticiones en rebajar entre dos y tres puntos para quienes hagan la declaración de la renta por módulos, así como medidas para quienes lo hagan por estimación directa. Igualmente se plantea una revisión de la devolución por IVA.
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