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La impugnación de la lista de HZ abre una fractura entre el Gobierno central y el vasco

Imaz cree que la ilegalización de la candidatura "no se entendería en la Europa democrática"

La impugnación de la lista abertzale Herritarren Zerrenda (HZ) anunciada ayer por el Gobierno central ha abierto el primer desencuentro de calado entre el PSOE y el PNV, principal partido del Ejecutivo vasco. El líder del PNV, Josu Jon Imaz, interpreta esta decisión como un efecto más del Pacto Antiterrorista, "excluyente" y firmado en "pleno apogeo del aznarismo". Imaz aseguró ayer que el PSOE demuestra una vez más su "incapacidad para marcar distancia del PP, bien porque no se atreve o porque no se ve con fuerzas". Para el PNV, la ilegalización de HZ "no se entendería en una Europa democrática".

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Josu Jon Imaz trasladó ayer a los medios de comunicación la "decepción" en la que a su juicio han sumido el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y el PSOE "a la sociedad vasca" por su incapacidad para separarse del PP tras la victoria electoral del 14-M. Desde Madrid, la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, restó importancia a esta crítica y destacó la vía de diálogo abierta por Zapatero con el Ejecutivo de Juan José Ibarretxe.

El análisis que hizo el líder peneuvista del resultado del primer encuentro del Pacto Antiterrorista, tras 14 meses sin reunirse, fue muy negativo. La decisión del Ejecutivo de Zapatero de impugnar la lista independentista sitúa el momento político actual, no en la "nueva etapa" que preconizan los socialistas, sino en un momento ya conocido en Euskadi: abril de 2002, cuando la intención de ilegalizar Batasuna por parte del gabinete de José María Aznar, con la anuencia de Zapatero, era un secreto a voces.

PNV, EA e IU y el Gobierno vasco al unísono reprocharon entonces al Ejecutivo de Aznar el recorte de libertades y su "obsesión" por retirar de la vida pública a Batasuna. Ayer, Imaz consideró que en una Europa democrática nadie entendería que se recortaran los derechos políticos de una parte de la sociedad vasca, al tiempo que afirmaba que el Pacto Antiterrorista también era excluyente hacia la mayoría de la sociedad vasca "contra la cual va dirigido".

Normalización política

Imaz, que se mostró partidario de que "haya cocina en la política vasca" para buscar acuerdos en favor de la normalización política, dibujó a un PSE-EE completamente plegado a la estrategia de Madrid. Para que exista esa cocina, según Imaz, es necesario que el PSE no esté con "falta de liderazgo", sin una "clara interlocución" y sin "solidez en sus criterios", algo que, según Imaz, caracteriza a los socialistas vascos en este momento.

El delegado del Gobierno en el País Vasco, Paulino Luesma, defendió ayer ante el lehendakari, Juan José Ibarretxe, la decisión de recurrir la lista de HZ. "No se puede pedir al Gobierno que incumpla la ley", señaló. Luesma hizo ver a Ibarretxe que el Gobierno vasco no puede reivindicar los pronunciamientos del alto tribunal cuando desestima el recurso del PP contra el plan Ibarretxe e ignorarlas cuando no son de su agrado, informa Isabel C. Martínez.

El Gobierno central anunció su decisión de impugnar la candidatura de HZ tras las reunión del Consejo de Ministros. Considera que esta lista supone una continuación de la actividad de la ilegalizada Batasuna, lo que vulneraría la Ley de Partidos Políticos, según explicó la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega.

El ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, ha ordenado ya a la Abogacía del Estado que prepare el texto de la impugnación, que se presentará el miércoles de la semana próxima ante la Sala Especial del Tribunal Supremo, encargada de dirimir el conflicto. Desde ese momento se abre un plazo de diez días que culminaría, si la candidatura fuera ilegalizada por el Tribunal Supremo, con la decisión del Tribunal Constitucional ante la posible presentación de un recurso de amparo.

De la Vega restó valor al malestar del Gobierno vasco por la decisión del Ejecutivo central y recordó que los socialistas "han abierto una nueva vía de diálogo clara con la Administración de Euskadi "que no se había producido desde hace más de seis años".

Paulino Luesma, delegado del Gobierno en el País Vasco, con el <i>lehendakari,</i> Juan José Ibarretxe.

PRADIP J. PHANSE
Paulino Luesma, delegado del Gobierno en el País Vasco, con el lehendakari, Juan José Ibarretxe. PRADIP J. PHANSE

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