La informática ayuda en la orquestación de partituras

Claudio Ianni (Firmat-Argentina, 1965) se dedica a orquestar y dirigir música para cine, teatro y ballet. Para el desarrollo de su trabajo cuenta con el programa Sibelius, un editor de partituras diseñado por músicos para los músicos.

Si tuviera que explicar en qué consiste su trabajo a una persona ajena a su profesión, Ianni empezaría por distinguir la tarea de orquestar de la de dirigir. "Son dos cosas distintas, pero complementarias. La orquestación es básicamente escribir una partitura para que la pueda tocar una orquesta. La dirección de orquesta es otro tipo de trabajo, es básicamente como el revelado de una fotografía, a través de la partitura sientes, imaginas la música que quieres oír, y la orquesta es tu instrumento". Nos explica las diferencias al terminar su charla sobre el programa Sibelius en el foro sobre Electrónica musical organizado por la tienda Polimúsica.

Este músico argentino, nacionalizado italiano y afincado en Madrid, viene colaborando desde hace algunos años con los compositores más importantes del cine español en bandas sonoras de películas como Intacto, El lápiz del carpintero y Descongélate, entre otras. Actualmente se encuentra a la espera de que Alejandro Amenábar termine de componer la música de su última película, Mar Adentro.

Se trata de un trabajo en el que se colabora estrechamente con el compositor. "Yo recibo el material en el estado en que lo tenga el compositor. Suele ser una maqueta que contiene la información básica de lo que son las notas. La escucho e interpreto pensándola para una orquesta. Luego voy al estudio de grabación y la dirijo", explica Ianni.

En un mundo, sobre todo el del cine, donde se trabaja siempre con muchas prisas, el programa Sibelius ha sido diseñado para facilitar el trabajo a los músicos por medio de una herramienta que les permite realizar con rapidez la edición gráfica de las partituras.

Intuitivo

"Es un programa muy intuitivo, de utilización muy sencilla que me facilita mucho todo lo que son cuestiones de orquestación básica". Además, es muy versátil a la hora de modificar la partitura cuando se entrega a los músicos para grabar la orquestación. "Toda la manipulación que nos vemos obligados a hacer en una partitura es muy rápida y simple con este programa".

Ianni considera que es un programa que, en definitiva, le permite crear estando lo más cerca posible de la libertad que tiene cuando trabaja con un papel en blanco sobre su escritorio, con la ventaja de poder escuchar en todo momento la música que tiene en la cabeza. Claro que los sonidos que reproduce el programa todavía están muy lejos de los que posteriormente saldrán de la orquesta durante la grabación. Pero, no obstante, es una herramienta válida para corregir errores durante la escritura.

A pesar del carácter intuitivo del programa, Ianni no piensa que sea la mejor herramienta para la gente que se inicia en el mundo de la música. "Para la gente que empieza creo que es más fácil hacerlo desde un programa secuenciador como pueden ser Logic, Cubase y otros. El editor de partituras se utiliza cuando uno va a grabar con músicos en una situación real y lleva las partituras, o también es un programa útil para estudiantes de conservatorio, con el que tienen la posibilidad de oír sus trabajos, y para profesores o profesionales que quieran editar sus partituras para ser tocadas".