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Dimite el seleccionador de baloncesto

Moncho López se siente ninguneado y deja el cargo a tres meses para los Juegos Olímpicos

Robert Álvarez

Moncho López dimitió ayer como seleccionador español de baloncesto. El estupor, por una decisión tan inesperada, y la preocupación, porque se produce a sólo tres meses para el inicio de los Juegos Olímpicos, recorrieron los despachos de la Federación Española de Baloncesto (FEB). La consecución de buenos resultados, a pesar de la tremenda inestabilidad a la que ha estado expuesto el cargo de seleccionador durante los últimos años, es el argumento que esgrime el vicepresidente José Luis Sáez para relativizar la crisis. "Contábamos con la presencia de Moncho López para los Juegos Olímpicos. He intentado convencerle para que continuara por el bien de la federación y de la selección, pero su dimisión es irrevocable y supone un contratiempo. Sin embargo, la federación tiene un equipo y un organigrama de trabajo que siempre ha funcionado. Lo demuestra el hecho de que hemos logrado los objetivos que nos hemos trazado a pesar de haber tenido tres seleccionadores diferentes en los últimos cuatro años", afirmó en referencia a las medallas obtenidas en los tres últimos europeos con tres seleccionadores diferentes: plata con Lolo Sainz en 1999, bronce con Javier Imbroda en 2001 y plata de nuevo con Moncho López el año pasado.

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Los motivos por lo que López (A Coruña, 1969) abandona la selección se han incubado desde que el pasado mes de diciembre se negociara sin éxito la mejora y ampliación de su contrato hasta 2005. "Entonces", cuenta Moncho López, "no llegamos a un acuerdo sobre mi retribución por unas cantidades mínimas. Desde ese momento renació en mí una sensación de interinidad. Creo que no se ha valorado de forma suficiente mi trabajo".

Moncho López fue el ayudante del seleccionador español en el Mundial de 2002 en Indianápolis, Javier Imbroda. Pero Imbroda fichó por el Real Madrid y una normativa de la Asociación de Clubes (ACB) le impidió hacer compatible el banquillo madridista con el de la selección. Semanas después, Moncho López firmó un nuevo contrato por dos años como técnico de la federación, sin que constara de manera explícita el cometido de seleccionador. Sin embargo, le fue conferida la máxima responsabilidad de una forma tácita después de haber dirigido con éxito a la selección durante la fase de clasificación para el Campeonato de Europa del año pasado. Una vez en Suecia, la derrota en la final ante Lituania fue el único peldaño que España no superó en el camino hacia el título.

El pasado mes de abril, López dirigió a la selección junior que obtuvo la medalla de bronce en el torneo de Manheim, mundial oficioso de la categoría. Pero el desencuentro entre el seleccionador y los directivos de la federación estaba latente. Finalmente, López ha preferido renunciar y aceptar la oferta que le ha hecho el Leche Río Breogán. El único equipo gallego de la ACB, que concluyó 15º en la Liga, le ofrece el mando técnico absoluto sobre su nuevo proyecto, y un contrato por dos temporadas, con opción a una tercera. "He aceptado la oferta de un equipo profesional y lo más honesto es dejar el cargo. El seleccionador debe preparar una cita tan trascendente como los Juegos sin distracciones y sin perjudicar ni a la selección ni a su club porque las suspicacias, por ejemplo, en el apartado de fichajes serían constantes", explica el ex seleccionador, cuyo contrato ascendía a unos 90.000 euros mensuales. En el Breogán de Lugo, su ficha será de unos 150.000 euros anuales. "No dejo la selección por dinero", dice López. "Voy a un club humilde en el que podré trabajar a gusto para seguir realizándome como entrenador y como persona".

La dimisión del seleccionador dejó perplejo al líder de la selección, Pau Gasol. "Ha sido una gran sorpresa. Es un técnico que ha demostrado que sabía llevar un grupo como la selección, tanto desde el punto de vista deportivo como humano. Estoy seguro de que la federación sabrá encontrar un excelente sustituto para los Juegos", afirma el pívot de los Grizzlies. La dimisión de Moncho López supone un nuevo contratiempo para la selección, tras la renuncia de Raúl López a acudir a Atenas. Ayer, Utah Jazz hizo público que dejó la decisión de participar en los Juegos Olímpicos en manos de los jugadores y recordó que las normas de la NBA prohíben que los equipos denieguen a los jugadores el derecho a competir con su selección.

La FEB nombrará un nuevo seleccionador con la mayor rapidez posible dada la inminencia con la que debe preparar los Juegos Olímpicos. Entre el 7 y el 15 de junio se dará a conocer la relación de jugadores que competirán en Atenas y que se concentrarán el 11 de julio en San Fernando. Uno de los principales aspirantes a suceder a López será el que hasta ahora era su ayudante, Joan Chichi Creus (Ripollet, Barcelona, 1956). Los candidatos son numerosos: Mario Pesquera, seleccionador Sub-20, Javier Imbroda, Gustavo Aranzana y el ex seleccionador junior y ahora entrenador del Ricoh Manresa, Ricard Casas, son algunos de ellos.

Moncho López, durante un entrenamiento de la selección.
Moncho López, durante un entrenamiento de la selección.CLAUDIO ÁLVAREZ

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Sobre la firma

Robert Álvarez
Licenciado en Periodismo por la Autónoma de Barcelona, se incorporó a EL PAÍS en 1988. Anteriormente trabajó en La Hoja del Lunes, El Noticiero Universal y el diari Avui.

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