CaixaForum, otra puerta madrileña a la cultura

La capital verá complementada su oferta artística con la apertura de CaixaForum-Madrid, el nuevo espacio cultural y social de la Fundación La Caixa, que estará finalizado en 2006.

Situado frente al Jardín Botánico y enmarcado entre las calles del Gobernador, Alameda, Almadén y Cenicero, este centro ofrecerá una amplia variedad de actividades culturales y sociales dirigidas a todo tipo de público. Charlas, exposiciones, seminarios o jornadas, además de representaciones musicales, de artes plásticas o fotografía, conformarán sus programas culturales.

Los arquitectos suizos Herzog & de Meuron, que convirtieron una central térmica a la orilla del Támesis en la Tate Modern de Londres, han sido los elegidos para transformar el edificio de la central eléctrica del Mediodía, de comienzos del siglo XX, que fue adquirido por la Fundación La Caixa en 2001, en CaixaForum-Madrid. Este centro se enmarcará en el proyecto de reordenación del eje Prado-Recoletos, dentro del triángulo de oro de la cultura, que delimitan el Museo del Prado, el Reina Sofía y el Thyssen-Bornemisza. Así lo destacaron ayer tanto el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, como la presidenta regional, Esperanza Aguirre, en el acto de colocación de la primera piedra del edificio.

Los arquitectos del proyecto son los que construyeron la Tate Modern de Londres

El alcalde destacó que CaixaForum-Madrid se constituirá en un "nexo de unión entre el eje Recoletos-Prado y el barrio de las Letras, o lo que es lo mismo, entre el Madrid del Siglo de Oro y el de la Ilustración".

La presidenta de la Comunidad, por su parte, aseguró que este proyecto "realza aún más la posición que ya ocupa Madrid, por la riqueza de sus pinacotecas y por el número y calidad de sus acividades culturales, al nivel de las principales capitales culturales del mundo".

Por su parte, el presidente de La Caixa, Ricard Fornesa, apuntó que más de 1,3 millones de personas participaron el año pasado en Madrid en las actividades organizadas por la fundación; mientras que el presidente de la fundación de la entidad, Josep Vilarasau, destacó que la construcción del nuevo centro cultural y social significa la "devolución" de la confianza mostrada por el ciudadano madrileño a la entidad catalana.

El edificio de CaixaForum, que supondrá una inversión total de 50 millones de euros, conservará la fachada original, se extenderá a lo largo de 10.000 metros cuadrados y estará distribuido en diferentes niveles, dos de ellos bajo rasante. El equipo de arquitectos que ha trabajado en el proyecto ha querido conservar la imagen del conjunto de la edificación. "El inmueble era de por sí una pieza importante en cuanto a sus calidades y a su historia, sólo estaba a la espera de una intervención", explicó Carlos Gerhard, uno de los redactores del proyecto: "Queremos mantener su esencia, para lo que hemos añadido a la estructura paneles de fundición, que con el tiempo se oxidarán y asemejarán al ladrillo de la fachada".

En la primera fase de rehabilitación y ampliación, iniciada en octubre de 2003, se trabajó en la consolidación y estabilización de las fachadas. Además, se eliminó gran parte del zócalo de granito que circundaba el inmueble. Con esta reforma, los arquitectos pretenden provocar la sensación de que el edificio está levitando sobre una plaza pública a nivel de calle. A través de esta plaza, que se extenderá hasta el número 36 del paseo del Prado y ocupará una superficie de 2.500 metros cuadrados, se accederá al vestíbulo de CaixaForum, ubicado en el primer nivel. "La plaza estará dividida en dos partes: una en la situada en la actual gasolinera del paseo del Prado, y otra que quedará justo por debajo del edificio, que quedará cubierta", especifica el experto.

CaixaForum-Madrid aspira a convertirse en una plataforma de divulgación de acuerdo a las necesidades culturales de nuestro tiempo. Su sede dispondrá de 2.500 metros cuadrados para salas de exposiciones, un auditorio con 322 plazas, mediateca, varias salas polivalentes para conferencias y otras actividades, además de talleres de conservación y restauración y un almacén de obras de arte.