Los sindicatos aplauden el anuncio de Chaves de que la Junta retomará la tutela de Cajasur en 2005

El anuncio del presidente de la Junta, Manuel Chaves, de que "no habrá problema" para que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero "subsane" la situación administrativa de Cajasur y devuelva a la entidad cordobesa a la tutela del Ejecutivo andaluz en 2005 fue recibido ayer con entusiasmo por los máximos responsables de UGT y CC OO. Por su parte el PP, que se amparó en la fundación por la Iglesia de la caja para quitar en 2002 ese control administrativo a la Junta, consideró que el debate "no está en iniciar una dinámica de reformas y contrarreformas".

La Junta trata desde 2000 que la caja que preside el cura Miguel Castillejo se someta a la ley andaluza, de modo que la Iglesia pierda su presencia privilegiada en los órganos de gobierno de Cajasur y que éstos se equiparen en su composición a los del resto de cajas andaluzas. El Gobierno central, dirigido entonces por el PP, impidió primero la aplicación de la norma autonómica al recurrirla al Tribunal Constitucional y dejarla en suspenso. Luego, en 2002, incluyó un artículo específico en la Ley Financiera para sustraer el control administrativo de la caja cordobesa a la Junta de Andalucía y otorgárselo al Ministerio de Economía en virtud de su fundación por la Iglesia. La aplicación de ese artículo permitió a Castillejo (sobre cuya gestión la Junta reclamó una investigación al fiscal anticorrupción) mantenerse en la presidencia y aumentar la presencia de la Iglesia en los órganos de gobierno hasta el 60%.

La llegada del socialista José Luis Rodríguez Zapatero al Gobierno central también traerá cambios a esta situación. En una entrevista con este periódico, Chaves anunció el pasado lunes que el Ejecutivo central incorporará en la ley de Acompañamiento de los Presupuestos de 2005 una disposición para devolver la tutela de Cajasur a la Junta.

Una decisión que el secretario regional de UGT, Manuel Pastrana, consideró "perfecta", puesto que "restablece y normaliza una situación de anormalidad propiciada por la gestión política del Gobierno central del PP". "No es normal que sea la única entidad que esté bajo el amparo y el control del Gobierno central, cuando deben restituirse las competencias de la Junta", agregó Pastrana, que mostró su respaldo a la decisión de Chaves. En similares términos se expresó el secretario regional de CC OO, Julio Ruiz, quien consideró "totalmente justa" esa decisión. Para Ruiz, este paso supondrá "la entrada en el paraguas de la vida democrática" de Cajasur "que deberá adaptarse a la ley andaluza y ceñirse al control del Gobierno andaluz".

El propio presidente de Cajasur, Miguel Castillejo, ya se mostró conciliador el pasado viernes ante el nuevo escenario que se abre con la llegada del PSOE al Gobierno central y expresó un deseo: "Que dentro de la legalidad, estemos cada día más unidos y más vinculados en todos nuestros quehaceres con la Junta".

Negociaciones

La opinión del portavoz adjunto del PP en el Parlamento andaluz, Salvador Fuentes, ante los futuros cambios fue distinta. "Desde el respeto a las decisiones que se adopten en Cajasur creo que no es bueno que un Gobierno se precipite, porque el gran debate de las cajas no está en quien tutela a quién o en iniciar una dinámica de reformas y contrareformas sino en la rentabilidad de las cajas, porque eso no es bueno para el sistema financiero", indicó el dirigente popular.

Según Fuentes, "hay que hilvanar sin ningún tipo de precipitación ni arrogancia, dejar que las cajas actúen y no intentar buscar revanchismos que no van a ningún sitio". Para el PP, "el gran debate de las cajas andaluzas esta en la rentabilidad de su sistema financiero, porque deben ser rentables y transparentes, para, a partir de ahí, ver si podemos competir con otras cajas de España". El portavoz adjunto del PP en el Parlamento aseguró que "el PSOE ha intentado ocultar este debate porque entiende que su reto es ocupar las cajas y no intentar que se gestionasen bien" y añadió que "no es bueno empezar con la precipitación y anunciando cosas que el sentido común debe conducir".

Finalmente Fuentes insistió en que "el debate en torno a las cajas andaluzas debe ser puramente técnico y se debe aislar el contenido político de nuestras declaraciones y alentar al sector financiero a la tranquilidad, porque Cajasur no puede seguir siendo el muñeco de ningún Gobierno, sino que hay que dejar que siga funcionando y creando riqueza".