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LA AMENAZA TERRORISTA | Golpe a ETA

Los etarras detenidos en Francia disponían de cuatro bombas listas para ser utilizadas

La policía francesa se incauta de numerosa documentación en los registros domiciliarios

F. Javier Barroso

La detención de la dirección del aparato logístico y operativo de ETA el pasado viernes en el sur de Francia ha permitido la localización de un importante arsenal de explosivos, según explicó ayer el ministro del Interior en funciones, Ángel Acebes. La policía francesa registró el domicilio de Félix Alberto López de la Calle, Mobutu, y su compañera sentimental, María Mercedes Chivite Berando, Mertxe, y el de Félix Ignacio Esparza Luri, alias Navarro, Gaba y Ana. En ellos halló cuatro artefactos explosivos que estaban listos para ser utilizados, además de numerosa documentación de la banda.

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Las detenciones se produjeron, según Acebes, gracias a una prolongada colaboración entre los Renseignements Generaux (la Policía Judicial francesa) y la Guardia Civil, que han comprobado los alquileres de inmuebles por parte de los miembros de ETA en Francia. Esparza Luri era el jefe de logística de la organización terrorista: se encargaba de proporcionar a los distintos comandos el armamento, los explosivos, el dinero y la documentación necesaria para cometer los atentados. Su detención el viernes en la localidad de Saint Paul les Dax llevó horas más tarde a la de Mobutu y Mertxe en Angulema.

López de la Calle está considerado por fuentes de la lucha antiterrorista como el número dos de ETA. Coordinaba buena parte de los aparatos en los que se divide la banda, como el militar, el político, el internacional o las finanzas. Además, realizaba sustituciones al frente de las diversas estructuras etarras cuando sus responsables eran detenidos por la policía y se encargaba de asegurar la continuidad de la actividad terrorista, según explicó Acebes. Para ello contaba con un número importante de colaboradores que le ayudaban en esas funciones. Su compañera sentimental, Mertxe, realizaba tareas de coordinación y también se dedicaba a compras en el exterior.

Los tres detenidos llevaban pistolas del calibre 9 milímetro parabellum, además de falsos documentos de identidad. La policía halló en la casa de Esparza Luri otra pistola, una importante suma de dinero, ordenadores y documentación de ETA, así como 50 temporizadores, varios documentos de identidad falsos y placas de matrículas igualmente falsificadas. En la vivienda de Mobutu y Mertxe fueron encontrados documentos falsos de identidad, dinero en efectivo, documentación de ETA, así como un vehículo robado con matrículas falsas en las proximidades.

Vivienda abandonada

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Acebes explicó ayer que a última hora del viernes fue localizada una vivienda en Bagnères de Bigorre, en el departamento francés de Hautes-Pyrénées, situada a unos 25 kilómetros al este de Lourdes. Había sido abandonada horas antes por los terroristas al enterarse de la detención de Esparza Luri. En la vivienda de Bagnères fueron localizadas dos mochilas, en cuyo interior había dos bombas preparadas en ollas. Cada una de ellas tenía unos tres kilos de explosivos. La composición exacta de los artefactos está siendo investigada por la policía francesa.

En la vivienda también fueron halladas dos bombas lapa, que, al igual que las anteriores, estaban listas para su entrega y uso inmediato, según el ministro en funciones. Por último, había media docena de libros bomba también preparados, así como diversos componentes para la fabricación de más artefactos explosivos, tales como detonadores.

"El hecho de que las bombas estuvieran preparadas sólo muestra las intenciones de ETA. Podrían haber sido utilizadas en un muy breve espacio de tiempo. Esta operación es uno de los golpes más duros que ha recibido la banda terrorista en los últimos años", señaló Acebes. Toda la documentación incautada y los ordenadores están siendo analizados por los investigadores.

Dos ciudadanos franceses, cuya identidad no fue facilitada, fueron arrestados el viernes por la tarde. Ambos podrían ser los dueños de la vivienda en la que se ocultaban Mobutu y Mertxe. La policía francesa investiga si los detenidos conocían la vinculación de éstos con ETA.

Gendarmes, ante la casa ocupada por López de la Calle y Chivite cerca de Angulema.
Gendarmes, ante la casa ocupada por López de la Calle y Chivite cerca de Angulema.EFE

Acusados de 15 asesinatos

Los tres supuestos etarras detenidos el viernes en el sur de Francia acumulan un amplio historial de sangre. Según los datos facilitados ayer por el ministro del Interior en funciones, Ángel Acebes, entre los tres acumulan 15 asesinatos.

- Félix Ignacio Esparza Luri. Integrante del comando Vizcaya, la policía le atribuye la participación el 16 de mayo de 1983 en los asesinatos de los funcionarios de policía Julio Segarra Blanco y Pedro Barquero González, así como de la esposa de éste último. También cree que intervino en los asesinatos del inspector de policía Moisés Cosme Herrero Luengo y del guardia civil Eugenio Recio García, en Getxo y Santurtzi (ambos en Vizcaya), respectivamente. En 1987 participa en el secuestro del industrial Andrés Gutiérrez Blanco y en los asesinatos del subteniente de la Guardia Civil Cristóbal Martín Luengo y del policía Vicente Montoya Salazar.

- Félix Alberto López de la Calle Gauna. Se le imputan los asesinatos de José García Gastiain, cuando transitaba junto a una comisaría el 25 de agosto de 1978; el de Saturnino Sota Argaiz, el 13 de diciembre del mismo año, y el del teniente coronel del Ejército Sergio Borrajo Paladín, el 14 de febrero de 1979. En 1980 formó parte del comando Araba.

Participa entonces, entre otros atentados, en los asesinatos de los guardias civiles José Vázquez Plata, Avelino Palma Brioa y Ángel Prado Mella en Salvatierra el 10 de abril de 1980.

- María Mercedes Chivite Berando.

En 1994 se incorpora al comando Madrid, donde interviene el 23 de mayo de ese año en el asesinato del teniente del Ejército Miguel Peralta Utrera.

El 1 de junio participa en el atentado contra el general del Ejército Juan José Hernández Rovira, quien muere al ser tiroteado cuando salía de su casa.

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Sobre la firma

F. Javier Barroso
Es redactor de la sección de Madrid de EL PAÍS, a la que llegó en 1994. También ha colaborado en la SER y en Onda Madrid. Ha sido tertuliano en TVE, Telemadrid y Cuatro, entre otros medios. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, está especializado en Sucesos y Tribunales. Además, es abogado y criminólogo.

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