El juez acusa a El Tunecino de ser el cerebro del 11-M

El juez Juan del Olmo, que instruye la investigación por los atentados del 11 de marzo pasado en los trenes de Madrid, ha identificado como director y coordinador de la masacre al huido Serhane Ben Abdelmaji, alias El Tunecino, de 35 años, contra el que ha dictado una orden de detención europea. En el escrito, el juez mantiene que Serhane Ben Abdelmaji fue "el elemento dinamizador de la actividad previa de concienciación de la yihad [guerra santa] entre las personas de su entorno", algunos de ellos detenidos en relación con los atentados.

El Tunecino vivía en Madrid desde hace años y trabajaba en una empresa de compraventa de pisos. El juez asegura en su orden de detención europea que Serhane Ben Abdelmaji hizo "expresas manifestaciones desde mediados de 2003 [poco después del final de la guerra de Irak] sobre la preparación de una actuación violenta en España y en concreto en la zona de Madrid" y actuó como ideólogo del ataque terrorista concienciando al resto de participantes en la acción criminal.

El juez también señala al marroquí Jamal Ahmidan, El Chino, de 33 años, como principal ejecutor de las órdenes de El Tunecino. Jamal Ahmidan, según el relato del juez Del Olmo, participó junto a Mohamed Oulad y Rachid Oulad en la obtención de la dinamita y en la preparación de las mochilas bomba en una casucha de Chinchón (Madrid).

Contra ellos va dirigida también la orden de detención europea dictada por el juez el pasado 30 de marzo.

El Chino participó en el alquiler de la finca de Chinchón utilizando un pasaporte falso a nombre de Youssef Ben Salah, según las conclusiones de la investigación judicial. El Chino aparece en la orden de detención "vinculado directamente a otros presuntos autores materiales de la colocación de los artefactos explosivos que estallaron en los trenes" causando 191 muertos y más de 1.400 heridos.